La Junta protege como monumento el Asilo de San Juan de Dios en Andújar

El conjunto, que comenzó a construirse en la segunda mitad del siglo XVI e incluye una iglesia barroca, sigue funcionando como residencia de ancianos

El Consejo de Gobierno de la Junta ha acordado inscribir en el Catálogo General del Patrimonio Histórico Andaluz, con la tipología de monumento, el Asilo de San Juan de Dios en Andújar (Jaén). El edificio, que sigue cumpliendo funciones similares a las que motivaron su construcción en la segunda mitad del siglo XVI, se encuadra en el conjunto de fundaciones promovidas en esta época a extramuros del antiguo recinto fortificado de la ciudad.

Con el paso del tiempo y como consecuencia del crecimiento urbano, se convirtió en uno de sus principales hitos arquitectónicos y sociales. Objeto de numerosas transformaciones y cambios de uso a lo largo de la historia, el Asilo de San Juan de Dios fue finalmente cedido en 1855 a las Madres de Desamparados de San José de la Montaña, que desde entonces lo vienen utilizando como residencia de ancianos.

Dentro del inmueble se diferencian dos partes: el asilo o antiguo hospital y la iglesia, que sigue el estilo de los templos conventuales barrocos de la zona. Ambas construcciones se conservan en buen estado. El asilo se distribuye alrededor de un patio de 22 metros de lado y dos pisos porticados con cinco arcos de medio punto apoyados sobre columnas toscanas, en la línea de la arquitectura palaciega jiennense de la época. El interior de las dependencias fue remodelado a fondo en 1984, aunque la sala de visitas y la biblioteca conservan los alfarjes originales y su decoración.

Junto al asilo, en el lateral izquierdo, se levanta la iglesia. Construida entre los siglos XVII y XVIII, tiene planta de salón de una sola nave. Cuatro pares de pilastras, a través de arcos, dividen su interior en cuatro tramos cubiertos por bóvedas de arista. La capilla mayor, elevada sobre gradas, consta de un testero enmarcado por un gran arco de medio punto con decoración de yeserías, en el que se inserta el retablo mayor presidido por la imagen de la Virgen de las Angustias. El programa decorativo del templo se completa con otros cuatro retablos barrocos de finales del siglo XVIII, dedicados a la Virgen de los Desamparados, el Sagrado Corazón, San José de la Montaña y San Juan de Dios.

Dos portadas principales

Las dos portadas principales del conjunto se sitúan en la fachada suroeste y destacan por su sencillez compositiva. La del hospital, de composición vertical, incluye una espadaña con un primer cuerpo de pilastras adosadas entre las que se abren vanos de medio punto y un segundo rematado por un frontón triangular.

La portada de la iglesia está formada por un arco de medio punto y una cornisa que sirve de base a una hornacina con una escultura, flanqueada por pilastras y coronada por un frontón partido con el escudo de la Orden de San Juan de Dios.

Los bienes muebles vinculados al conjunto son muy escasos debido a las pérdidas y a los continuos cambios de estructura y funcionamiento. Tan solo se inscriben en el Catálogo General del Patrimonio Histórico cinco pinturas anónimas de caballete, que datan de los siglos XVIII y XIX.

Para preservar la adecuada percepción del monumento, el decreto de inscripción establece un entorno de protección alrededor del edificio que afecta a espacios públicos y privados de la Plaza de la Constitución y de las calles Ollerías, Juego de Pelota y Doctor Montoro Ibáñez.

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