Más de 250 efectivos trabajan en las tareas de extinción del incendio forestal que se declaró el viernes por la noche en Benicolet (Valencia) y que afecta, además de a este localidad, a los términos municipales de Almiserà, Rótova y Llutxent. El fuego todavía no está controlado y, por el momento, se desconoce el número de hectáreas que ha calcinado.

Así lo ha explicado el conseller de Gobernación, Serafín Castellano, que se ha desplazado hasta el lugar del incendio a primera hora de este sábado para conocer de primera mano la evolución de las tareas de extinción.

Castellano ha destacado que se trata del primer incendio forestal del año y ha realizado un llamamiento a la "prudencia" debido a las "elevadas" temperaturas que se esperan para esta jornada, que pueden llegar a alcanzar los 36ºC en puntos del litoral sur de la provincia de Valencia.

"Se espera un día complicado ya que las altas temperaturas, el viento de poniente y la baja humedad complican las tareas de extinción, que en estos momentos, una vez controlado el primer frente, se concentran en detener el avance de las llamas en el segundo frente, que se encuentra en un barranco de difícil acceso para los medios terrestres", ha explicado el conseller.

El titular de Gobernación ha añadido que el dispositivo de extinción está integrado por 14 medios aéreos, —seis aviones y ocho helicópteros— así como 15 brigadas, cuatro dotaciones de bomberos y 50 efectivos de la Unidad Militar de Emergencias (UME).

El Centro de Coordinación de Emergencias (CCE) de la Generalitat también ha desplazado hasta el lugar el Puesto de Mando Avanzado para coordinar las tareas de extinción y el vehículo de telecomunicaciones Satcom, según han informado fuentes del Consell en un comunicado.

Serafín Castellano ha indicado que a primera hora de la mañana se desalojaron de manera preventiva alrededor 40 viviendas de la urbanización Montevernisa por el humo, sin que existiera riesgo ni para las personas ni para las propiedades.