La Isla de Siltolá reúne los versos de Aquilino Duque, uno de los únicos autores de los 50 sin antología poética

Cree que "ahora todo el mundo escribe lo que llaman poseía" y "hay poetas decadentes, que lo son sin escribir versos"

La editorial La Isla de Siltolá acaba de publicar 'Reloj de arena', en la colección Arrecifes, una obra que reúne los versos desde 1950 a 2009 del escritor sevillano Aquilino Duque (1931), uno de los únicos autores de la generación de los 50 sin antología poética, algo que el sello atribuye al "anómalo" funcionamiento del mundo editorial español y la valoración del poeta.

En una entrevista concedida a Europa Press, Duque ha manifestado que la publicación era "esperada y ha sido una sorpresa agradable que han querido darme unos amigos". De este modo, 'Reloj de arena' cuenta como esencia con la "poesía aforística" de este poeta Premio Nacional de Literatura.

Al respecto, detalla que la obra recoge todos sus poemas ya publicados, pero "se ha hecho con arreglo al gusto de los antojos" de amigos y la editorial, "yo no he intervenido para nada, sólo me he limitado a dar las gracias", precisa Luque.

Entretanto, defiende que la poesía es "fundamental" en su vida, "empecé escribiendo poesía y la prosa que escribo sería distinta sin ella, que es mi punto de partida y llegada", confiesa Luque, quien señala que los poemas "sólo" le han dado "satisfacciones en la vida y me han ayudado mucho, como a la hora de encontrar trabajo".

Así, destaca que "siempre" ha escrito poesía y se ha fijado "en los grandes modelos de cada época, que ahora no los hay", de modo que, agrega, "me he apoyado mucho en gente con quien he coincidido, mayores que yo y más jóvenes". Por ello, considera que le debe "mucho" a Federico García Lorca, Rafael Alberti, Juan Ramón Jiménez, los hermanos Machado, Blas de Otero, Pablo García Baena, Claudio Rodríguez, José Mateos o José Luis Tejada, entre otros.

En cuanto al papel de la poesía en la actualidad, cree que "ahora todo el mundo escribe lo que llaman poseía, gente que puede llamarse poeta, pero tiene que demostrarlo". No en vano, "hay poetas decadentes, que lo son sin escribir versos, y en cambio hay otros que tienen rigor, como algunos de la provincia de Cádiz que saben lo que se hace, como Felipe Benítez Reyes, quien conoce muy bien el oficio", puntualiza Aquilino Duque a Europa Press.

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