El presidente del Fomento del Turismo de Mallorca, Pedro Iriondo, ha asegurado que no es un "forajido" y que sólo dimitirá si la Junta Directiva de este organismo se lo pide, tras las declaraciones que hizo este miércoles en las que consideró que los emigrantes que están trabajando en el sector turístico, en concreto, los "sudamericanos y los africanos, no pueden vender la isla a los visitantes".

En declaraciones a Europa Press, Iriondo ha admitido que se "arrepiente" de estas manifestaciones y ha negado ser un "xenófobo", al tiempo que ha recalcado que él no pretende "aferrarse a ninguna silla", aunque le sabría "muy mal" no poder llevar a cabo su labor al frente de Fomento del Turismo, por la que, según ha subrayado, no cobra "nada".

Así, ha aseverado que en ningún momento pretendía "ofender" a los emigrantes, por lo que, a su juicio, sus declaraciones se han "sacado de contexto", ya que, según ha aclarado, lo que quiso decir en el I Foro del Turismo es que los extranjeros nuevos que llegan a Mallorca para trabajar en la temporada turística desconocen la "idiosincrasia" de la isla.

Por ello, ha abogado por formar a los emigrantes que trabajan en el sector turístico en "cultura general básica", con el fin de explicarles "lo que es una sobrasada, una ensaimada, un butifarró y quién fue Fray Juníper Serra", entre otros aspectos.

Preguntado sobre si esta formación también debería destinarse a los ciudadanos de otras Comunidades Autónomas que llegan a Mallorca a trabajar en este sector, ha considerado que no es necesario, ya que, en su opinión, "un español sabe lo que es la ensaimada y la sobrasada y tiene una cultura general de lo que es Mallorca".

Respecto a las manifestaciones que ha hecho el presidente del Govern, quien esta mañana ha considerado que el presidente del Fomento del Turismo de Mallorca "no es la persona más adecuada" para estar al frente de esta entidad, tras sus "muy desafortunadas" declaraciones, Iriondo ha estimado que Antich "no le debe conocer" y ha señalado que no sabe "por qué lo dirá", ya que, en su opinión, no ha hecho "nada malo", sino únicamente ser un "trabajador y un luchador por el fomento del turismo durante 40 años".

Además, ha añadido que tiene "muchos amigos emigrantes" y ha recordado que él mismo vino a Mallorca, después de vivir sus primeros 17 años en México, por lo que ha afirmado que no tiene "nada contra nadie", sino que lo único que trataba de exponer en el citado foro es "cómo se pueden llevar a cabo las campañas de amabilidad y de atención al cliente".

Curso básico de cultura general

"No terminé de expresarme, sino que me quedé a mitad de camino, ya que no he pretendido ir en contra de los emigrantes, dado que esto iría en contra de mi ética y mis principios morales", ha precisado, al tiempo que ha aseverado que lo único que quería decir es que hay que "reciclar" a los trabajadores extranjeros que se incorporan al mercado laboral del sector turístico para que conozcan las "costumbres" de Mallorca y sepan así responder a las dudas de los visitantes sobre gastronomía, historia o ubicación de edificios emblemáticos, como la Catedral.

"¿Es una mentira lo que estoy diciendo?", se ha preguntado Iriondo, quien ha considerado que se podrían celebrar charlas durante cuatro semanas en los hoteles destinadas a los trabajadores extranjeros para que adquieran conocimientos básicos de la historia y la gastronomía de Baleares. "Seguro que estos trabajadores estarán contentos de conocer un poco nuestras costumbres", ha sostenido.

El presidente del Fomento del Turismo de Mallorca ha estimado que "no es de recibo" que se le "ataque" y se le "crucifique" de esta forma, refiriéndose así a las críticas que ha recibido a raíz de sus declaraciones por parte de sindicatos, de diversos partidos políticos y organizaciones hoteleras.

Por otro lado, Iriondo ha insistido en que lleva 40 años trabajando en el mundo del turismo y "todo el mundo sabe" quién es y conoce que es "incapaz de pensar así como se ha publicado" en los medios de comunicación.

"¿Por qué no hablan de lo que he hecho por salvar el fomento del turismo en una organización que tiene 105 años?", ha preguntado, a la vez que ha recalcado que, de momento, nadie le ha pedido la dimisión, porque "saben como soy y que no tengo problemas con nadie, por lo que todos los de la Junta Directiva están conmigo".

Mejorar el trato a los turistas

Por otra parte, Iriondo ha asegurado que, a pesar de que a los turistas se les trata "bien" en Mallorca, aún se les puede tratar mejor, teniendo en cuenta que todavía hay gente que "piensa que el turismo es molesto, porque llenan las playas los sábados y domingos e impiden que se pueda circular por las carreteras".

Por esta razón, ha indicado que hace unos días, pidió a Antich que realice una "gran campaña institucional" para "mentalizar a todo el pueblo de Mallorca" sobre la forma de tratar al turista y concienciar a los ciudadanos de que esta industria representa casi el 80 por ciento del PIB balear.

Como ejemplo del buen trato que se debe dar a los visitantes, ha citado que los trabajadores del sector turístico deberían hablar "un poco" el inglés, ya que, a su juicio, el trato con el turista extranjero es "más tosco" cuando no se le habla en este idioma.