La Policía Nacional de Oviedo detuvo la semana pasada a los cabecillas asturianos de una organización destinada a la trata de mujeres con fines de explotación sexual. Se trata del propietario de un club de alterne, su pareja sentimental y el encargado.

El empresario, que ingresó en prisión junto a su pareja, había sido detenido en otras ocasiones y estaba relacionado con otros temas de prostitución en las ciudades de Cáceres, Badajoz y Toledo.

Según informó este Cuerpo, en la operación se detuvo también al propietario y al encargado de un club cántabro, con los que el clan asturiano intercambiaba jóvenes para su explotación sexual.

La investigación se inició en el mes de diciembre del año 2010 cuando en la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de Bilbao recibió una denuncia de una mujer que manifestó haber sido víctima de un delito de trata de personas con el fin de ser explotada sexualmente por parte de los responsables de un club ubicado en la zona oriental de Asturias.

El Grupo I de la Brigada Provincial de Extranjería y Fronteras de la Jefatura Superior de Policía de Asturias abrió una investigación que llevó a descubrir la existencia de un entramado empresarial fantasma relacionado con el mundo de la prostitución dirigida por un conocido empresario de la noche y por su pareja sentimental.

Al parecer el empresario se estaba dedicando a favorecer la entrada de ciudadanas brasileñas en España para que ejercieran la prostitución en su club. Para llevar a cabo esta tarea contaba con la participación de su pareja sentimental de nacionalidad brasileña y de un socio brasileño, encargados de seleccionar a las candidatas en su país de origen.

Una vez en España, las jóvenes eran recibidas por el empresario que les comunicaba que había contraído una deuda de 3.500 euros, que deberían saldar trabajando en el club con unas condiciones de trabajo que diferían mucho de las prometidas en Brasil. Además, las mujeres eran sometidas a un exhaustivo control de movimiento bajo la amenaza de sufrir graves daños si se escapaban.

En algunas ocasiones las deudas fueron saldadas por otro empresario de un club de Cantabria lo que suponía que la joven que era "comprada" debía trasladarse a este club sin posibilidad de rechazar esta oferta.

Así, algunas lograron abandonar este club cántabro no sin antes ser amenazadas de muerte por parte del propietario y el encargado. Sobre este empresario cantabro se llevó a cabo una investigación minuciosa por parte de las Brigadas Provinciales de Extranjería y Fronteras de Bilbao, Cantabria y Burgos, en colaboración con la UCRIF Central, que llevaron a las detenciones de los dos responsables como presuntos autores de los delitos de trata de personas con fines de explotación sexual, detención ilegal, amenazas y coacciones.

En los registros domiciliarios llevados a cabo en el domicilio del empresario y en el cub de alterne, los agentes se incautaron de un ordenador portátil, y abundante documentación contable así como 53.200 euros en efectiva.

Las investigaciones llevadas a cabo por los agentes de Oviedo sobre el "poderío" económico y patrimonial del empresario asturiano resultaron fundamentales para descubrir un complejo entramado empresarial fantasma basado en la supuesta existencia de empresas y administraciones en la que figuraba como administrador único o como socio el empresario y que utilizaba supuestamente para blanquear dinero.