Fiebre Bieber: "Hemos estado desde el viernes en la cola, Justin se lo merece todo"

  • Cientos de fans pasaron las noches previas al concierto de Justin Bieber en Madrid junto al Palacio de Deportes.
  • Este miércoles le toca el turno a Barcelona.
  • Así se vivieron en Madrid las horas previas al concierto.
  • Justin Bieber: bueno para sus fans, mal rollo con la prensa.
Fans de Justin Bieber a las puertas del Palacio de Deportes, el pasado lunes.
Fans de Justin Bieber a las puertas del Palacio de Deportes, el pasado lunes.
Jorge París
Fans de Justin Bieber a las puertas del Palacio de Deportes, el pasado lunes.

Han venido de Vigo, de Albacete, de Almería. Los más afortunados, de Madrid. Y llevaban horas, o días, esperando a que las puertas del Palacio de los Deportes de la capital se abrieran este martes para ofrecer el concierto de Justin Bieber, el adolescente del flequillo que, afirman sus fans, "merece todo y más". En Barcelona, donde recalará el cantante al día siguiente, ya hay decenas de seguidores junto al Palau de Sant Jordi.

Verónica y sus amigas son algunas de las que compraron la entrada el pasado mes de diciembre para no perderse el directo de su ídolo en Madrid. Entre tarareos del single más conocido del artista -"baby, baby, baby, uhhhh"-, la joven explica que lleva en la plaza contigua al recinto donde Bieber actuará por la noche, desde el viernes. ¿Por qué? Abre los ojos, sorprendida. La respuesta es obvia: "Porque canta muy bien, y porque es muyyy guapo".

En el lugar, las chicas son legión. Sólo algún chico se ha animado a formar parte de esa masa ingente de fans -unas 300- que gritan el nombre de Justin. "A los chicos no les cae bien porque le tienen envidia", explica David, vestido a la imagen del icono juvenil. Junto a él, sus amigas refuerzan su argumento: "Porque es un dios y porque es perfecto".

Las sombrillas y las sillas playeras señalan el rincón donde se refugia un pequeño grupo de padres sacrificados que han accedido a acompañar a sus hijas menores y ayudarlas "en la causa", como lo define una madre. Su familia ha organizado un sofisticado sistema de relevos que les permite, al menos, irse a comer mientras guardan el sitio. Junto a ella, otra madre asegura que el éxito de Bieber se debe a que es "un niño prodigio".

Los que se han quedado a pasar las noches junto al auditorio revelan, apenados, que no han podido soñar con Justin Bieber: "Apenas hemos dormido, pero no nos importa. Queremos estar en la primera fila, es el objetivo". A la pregunta de si, después de eso, tendrán energías para corear las canciones del álbum My world, el grupo responde con una explosión de gritos.

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