En la temporada de descuentos, las tiendas se quitaron de encima el 88% de la mercancía y facturaron 67,5 millones de euros, superando ligeramente los resultados de 2005. Claro que la estrategia comercial también tiene mucho que ver: el periodo empezó con rebajas del 20% y acabó acariciando el 70% en algunos productos. Los más populares fueron, sin duda, los textiles. Gracias a la ropa, los comerciantes han hecho el 52% de la caja, muy por encima del calzado (18%), los electrodomésticos (13%) o los muebles (11%).