El servicio de Alergología del Hospital Universitario Nuestra Señora de Candelaria (HUNSC), dependiente de la Consejería de Sanidad del Gobierno de Canarias, realizó en 2010 casi 100.000 pruebas de alergia a sus pacientes, en concreto, 95.596, necesarias para establecer el diagnóstico correcto por parte de los alergólogos.

En este sentido, el año pasado se efectuaron 17.562 consultas, de las que 7.157 fueron nuevas (primeras) y el resto, 10.405, fueron sucesivas, es decir, para el seguimiento de la patología alérgica de cada paciente.

Se trata del servicio de referencia de esta especialidad en la provincia de Santa Cruz de Tenerife, ya que asume además del área metropolitana, el sur e isla Baja de Tenerife, a los usuarios del área de influencia del Hospital Universitario de Canarias y las islas de La Palma, La Gomera y El Hierro, lo que supone que atiende a casi la mitad de la población canaria con problemas alérgicos.

Así, para agilizar la situación de estos pacientes a los que se prioriza según su urgencia, el HUNSC no solo dispone de varias consultas en el propio centro hospitalario, sino que además cuenta desde 2010 con nuevas aperturas en el Hospital de Ofra.

Todo ello ha permitido reducir la lista de espera de este servicio, que 31 de diciembre de 2010 contaba con 2.160 pacientes, 821 personas menos respecto al mismo periodo en 2009, que se situaba en 2.981 personas.

Canarias en el marco de las patologías alérgicas

A nivel mundial se ha detectado un incremento en el número de casos con esta patología y según la Organización Mundial de la Alergia (WAO) , que entre el 4 y el 10 de abril celebra la Semana Mundial de la Alergia, indica que entre un 30 y 40 por ciento de la población mundial está afectada por una o más enfermedades alérgicas, que además, son muy diversas y van desde las relacionadas con el polen o los ácaros, a los alimentos, los medicamentos o el látex, entre otras.

Además, también prevé que los problemas alérgicos crecerán a medida que la contaminación atmosférica y la temperatura ambiental aumenten debido a los cambios ambientales y climáticos, que afectan a los recuentos de polen, el números de insectos que pican y la prevalencia de hongos asociados con enfermedades alérgicas.

A este incremento de patologías alérgicas debe añadirse que, aunque afortunadamente la población ha alcanzado en los últimos años una mayor expectativa de vida, ahora hay más personas que debutan con alergias en edades bastante avanzadas, y no solo en la infancia o la juventud.

Canarias no permanece al margen de este contexto mundial y cuenta además, con otros condicionantes que la convierten en una zona en la que existe una mayor prevalencia de personas alérgicas, como son los factores climatológicos y su ubicación geográfica.

Por ello, el jefe del servicio de Alergología del HUNSC, el doctor José Carlos García Robaina, indica que ante la sospecha de padecer o sufrir signos relacionados con brotes alérgicos o reacciones de este tipo, "lo mejor es utilizar los recursos sanitarios y dirigirse, en primer lugar, al médico de familia de Atención Primaria para que desde aquí puedan darse los primeros pasos en el tratamiento de la enfermedad y si así lo requiriese, que sea tratada por un especialista de forma particular".