En París, varias decenas de jóvenes lanzaron piedras y botellas contra un grupo de antidisturbios destacado en la plaza de la Nación, lugar en el que terminaba la marcha parisiense.

Los agentes respondieron lanzando gases lacrimógenos, lo que dispersó a los alborotadores.

Estos se reagruparon en una calle cercana donde incendiaron un automóvil, rompieron los escaparates de algunos comercios y destrozaron cabinas telefónicas.

En otras ciudades también hubo incidentes al término de las manifestaciones contra el Contrato de Primer Empleo (CPE), que da a las empresas la posibilidad de despedir sin justificación a los menores de 26 años durante los veinticuatro primeros meses.

En Lille (norte), donde los sindicatos afirman haber reunido a 30.000 personas (11.000 según la policía), la marcha terminó con lanzamiento de piedras y huevos por parte de algunos manifestantes contra los antidisturbios, que respondieron con gases lacrimógenos.

En Lyon (este), la manifestación contra el CPE se cruzó con otra convocada por la comunidad turca de la ciudad para protestar por la colocación de un monumento conmemorativo del genocidio armenio.

Algunos de los participantes en esas dos protestas protagonizaron enfrentamientos y peleas.

En Rennes (noroeste) y Nancy (noreste), los manifestantes ocuparon las vías férreas que atraviesan las ciudades, lo que obligó a intervenir a la policía para desalojarlos.

160 manifestaciones

Los sindicatos de estudiantes habían convocado 160 manifestaciones en todo el país y aspiraban a reunir un millón y medio de personas en la tercera jornada nacional de protesta contra el Contrato de Primer Empleo (CPE).   Estudiantes y trabajadores piden al Gobierno que retire este contrato destinado a los menores de 26 años y que permite a las empresas despedirles sin ninguna justificación durante los primeros 24 meses.

Situados tras una pancarta con el lema "Retirada del contrato de primera contratación", los principales líderes sindicales abrieron el cortejo parisiense en la plaza de Denfert-Rochereau, desde donde se dirigirán a la Plaza de la Nación.

Los sindicatos exigen al Ejecutivo que retire el CPE antes de dialogar sobre las modalidades para impulsar el empleo entre los jóvenes, entre los que la tasa de paro supera el 22 por ciento.

"Primero que retiren el CPE y después abrimos las negociaciones del conjunto de la situación problemática del empleo de los jóvenes", aseguró el secretario general del sindicato CFDT, Francois Chéréque.

El líder del sindicato estudiantil UNEF, Bruno Julliard, aseguró ayer que la manifestación muestra "que la movilización es cada día más fuerte" por lo que pidió al Gobierno que retire el CPE "hoy mismo, porque si no será obligado a hacerlo mañana".

En otras ciudades francesas la manifestación tuvo lugar con anterioridad, con datos de participación dispares, según se cite la fuente policial o la de los organizadores.

La manifestación más importante tuvo lugar en Toulouse (sur), con 21.000 personas según la policía (45.000 según los organizadores).

Entre 15.000 y 35.000 manifestantes hubo en Rennes (noroeste), entre 10.000 y 25.000 en Lyon (este) y entre 9.500 y 15.000 en Pau (sureste).

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