Las revoluciones del norte de África siguen produciendo una presión migratoria que ha colocado a la isla italiana de Lampedusa en el centro del huracán.

Esta madrugada se han logrado rescatar al menos once cuerpos sin vida de inmigrantes tunecinos que intentaban llegar en patera allí.

En el bote viajaban treinta personas y sólo han sido encontradas con vida dos, aunque las noticias sobre este extremo aún son confusas.

Pueden que no sean los únicos. Once inmigrantes, entre ellos un niño, desaparecieron y se cree que pudieron ahogarse cuando intentaban llegar a la isla italiana de Lampedusa desde las costas de Libia, según informaron a los medios de comunicación italianos varios de los compañeros que viajaban con ellos en la misma embarcación.

"Partimos de Libia y once de las personas que estaban conmigo murieron en el mar. A nosotros nos rescató un barco pesquero. Habíamos salido cuatro días antes de que mis compañeros se ahogaran en el mar", explicó uno de los supervivientes al Corriere della Sera.

Según el relato, a bordo de la embarcación se encontraban en el momento de la partida 17 personas procedentes de Gambia y Sudán que intentaban alcanzar la costa italiana.

Una ola hizo volcar la barcaza y tan sólo seis de ellos consiguieron agarrarse a piezas de plástico y madera hasta que fueron rescatados por un barco pesquero egipcio que avisó a las autoridades italianas.

El portavoz de la Guardia Costera, Cosimo Nicastro, dijo en unas declaraciones al canal de televisión Sky Tg24 que durante este miércoles las autoridades italianas socorrieron a un grupo de 5 inmigrantes que se encontraba a bordo de un barco pesquero egipcio y que necesitaba asistencia médica.

Según explicó Nicastro, también este miércoles otras seis personas que viajaban en un pesquero egipcio fueron rescatadas y trasladadas a tierra cuando la tripulación del barco contactó con las autoridades italianas, por lo que no descartó que ambos grupos de inmigrantes pudieran haber viajado en la misma embarcación.

Otros 300 inmigrantes han sido interceptados por las autoridades de Túnez mientras navegaban rumbo a Europa.

Los emigrantes eran nacionales de Somalia, Sudán y Bangladesh que residían en Libia. Aunque no se sabe desde qué punto del país partieron, se cree que fueron trasladados desde Ras Jdir y Ben Guerdane, en la frontera con Libia, donde han comenzado las evacuaciones de los desplazados.

Desde el miércoles por la mañana han llegado a la isla de Lampedusa unos 500 inmigrantes procedentes del norte de África en diez embarcaciones, explicó la Guardia Costera.

Desde que estallaron las revueltas en el mundo árabe, el pasado mes de diciembre en Túnez, Lampedusa ha recibido miles de inmigrantes que se agolpan en sus centros de acogida. Para frenar esta oleada de llegadas a la isla, las autoridades italianas han comprometido 80 millones de euros en equipamiento con la nación magrebí.

Además, el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, visitó este miércoles la isla -situada muy cerca de la costa de Túnez-, prometió expulsar a los inmigrantes y afirmó quen las próximas 48 a 60 horas en Lampedusa "habrá solo lampedusanos". Berlusconi defendió que la isla "siempre ha sido un paraíso y volverá a serlo".