Cerca de medio millar de personas, según fuentes de la Policía Municipal, se han manifestado este domingo en Valladolid convocadas por la Coordinadora Vallisoletana por la Vida y la Mujer par protestar contra el aborto y la eutanasia con motivo del Día Internacional de la Vida, que se celebró el pasado 25 de marzo.

La protesta ha recorrido la distancia entre la plaza Fuente Dorada y la Plaza Mayor de la capital mientras los manifestantes han coreado lemas como 'Sí a la vida', 'La vida es bella, ayúdala a ella' y 'Que bote la vida'. Durante la marcha, varios voluntarios han desfilado con huchas para recaudar donaciones.

Al llegar a la Plaza Mayor, las reivindicaciones han dado paso a un minuto de silencio, tras el cual el director del Día de Valladolid, David Frontela, ha leído el manifiesto en apoyo de la protesta.

Frontela ha agradecido la presencia de los manifestantes, ya que "muchas veces" la gente se preocupa "por pamplinas", en lugar de aspectos "tan importantes como la vida". En su discurso, el periodista ha pedido que "se avive la conciencia del valor de toda vida humana", así como que "se exija su respeto y protección legal, desde la concepción hasta la muerte natural".

En este sentido, David Frontela ha reclamado a las fuerzas políticas que "incluyan en sus programas electorales el compromiso de cortar el paso a la cultura de la muerte" que se ha impuesto, a su juicio, "en España durante las últimas décadas". Asimismo, ha reivindicado el derecho "a la objeción de conciencia" para los profesionales sanitarios que se nieguen a colaborar "en cualquier práctica que atente contra la vida".

"carta de ciudadanía"

En declaraciones recogidas por Europa Press, la presidenta de la asociación Provida, María Arranz Herrero, ha criticado que, hoy en día, el aborto sea "carta de ciudadanía" y ha recordado que "ha habido muchos años de silencio" en esta materia, pero ha advertido de la existencia de problemas para las mujeres que interrumpen su embarazo, como el denominado "síndrome post-aborto".

No obstante, la responsable de Provida ha insistido en que los actos que este fin de semana se han producido en diferentes puntos del país "no son una lucha contra el aborto, sino una defensa de la vida". En este sentido, Arranz se ha marcado como objetivo de dichas protestas "cambiar la mentalidad de una sociedad adormecida" y "concienciar de lo que esta práctica supone para el niño, la mujer y la sociedad".

Asimismo, María Arranz ha asegurado que "el aborto ha existido siempre", pero ha advertido que desde con la "despenalización parcial" aprobada en 1985, estas cifras "se han disparado".

Por su parte, el responsable del Foro de la Familia en Castilla y León, Rafael López Carrillo, ha confesado que la idea inicial era que las protestas "fueran simultáneas en toda España", aunque al final se ha optado por cambiar los horarios para favorecer "la gran manifestación en Madrid". Sin embargo, el responsable regional del Foro de la Familia ha pronosticado que, en próximos años, "sí que se realizarán conjuntamente".

La concentración vallisoletana ha sido convocada por La Coordinadora por la Vida y la Mujer, integrada por las asociaciones ACdP, Cultura de la Vida, Derecho a Vivir, Feministas Independientes Españolas, Foro de la Familia, HazteOir, Libertad Viva, Provida y RedMadre.