El presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Antonio Cosculluela, ha celebrado este sábado el décimo aniversario del Plan de Formación para Bomberos de la institución con una buena representación de los efectivos de los parques comarcales y municipales que han participado a lo largo de este tiempo en la oferta formativa.

Los alumnos de la décima promoción han recibido sus diplomas como cierre del curso 2010 y de una década en la que la Diputación ha formado en la provincia a 540 personas, que ahora cuentan con los conocimientos y recursos necesarios para hacer frente a cualquier situación de riesgo.

Más allá de las cifras, para Antonio Cosculluela este programa "es un antes y un después" no sólo en la formación, "que ha sido una prioridad para nosotros", sino también en la evolución de las infraestructuras, las dotaciones o la creación de los parques.

"Y sólo así se llega a la profesionalización que dejan patente en cada intervención los efectivos de esta provincia", ha señalado el presidente de la DPH, para subrayar también el "modelo de despliegue de los medios con que contamos en el territorio y la estructura comarcal de los parques". Cosculluela ha aludido también al equilibrio presupuestario entre el servicio más eficaz para los ciudadanos, una mayor capacitación y los mejores equipos.

El programa formativo se desarrolla a lo largo del año para ofrecer cursos de formación básica, otros dirigidos a la especialización y el reciclaje de los profesionales y prácticas reales en campo de pruebas.

En estos diez años, las clases han abarcado una treintena de áreas como la química sobre el fuego, aspectos relativos a la protección individual, la parte jurídica y penal de la actividad de los bomberos, manejo de bombas y autombombas, salud laboral y primeros auxilios, cómo se debe actuar en accidentes con sustancias peligrosas, técnicas de orientación, de primeros auxilios, investigación de incendios o intervención en actividades subacuáticas.

Practicas en simulador

Entre vivencias y recuerdos, tanto las autoridades como los implicados en la formación también han podido conocer de primera mano la nueva herramienta del plan: un simulador de fuego con el que las futuras generaciones de alumnos podrán aprender las técnicas de apagado de incendios en viviendas.

En este simulador, dos grandes contenedores conforman una casa de dos pisos, con cocina, salón, baño y dormitorios controlada por cámaras de videovigilancia. Allí, los profesionales han puesto en práctica algunos protocolos de actuación.

Las prácticas, que hasta ahora ya representaban más de la mitad del periodo formativo, pasarán a tener un mayor protagonismo. En el segundo semestre habrá seis sesiones de cinco horas de duración, que se programarán los sábados y que tendrán como epicentro el campo de entrenamiento de la Diputación en las instalaciones del Vivero Provincial.

Este año el ámbito de Protección Civil contará con un presupuesto de alrededor de medio millón de euros que se destinará a prevención, formación y dotación de equipamientos para los Parques de Protección Civil.

Diez años de formación

El Plan de Formación Continua para Bomberos de la DPH abarca tanto la formación básica de los voluntarios en los diferentes parques municipales y comarcales como el reciclaje de profesionales ya en activo.

De los 61 alumnos que terminaron los cuatro cursos del pasado año, un 59 por ciento se han iniciado como bomberos, y el resto, un 41 por ciento, ha mejorado sus habilidades.

A partir del año 2000 la Diputación apostó por el diseño de un Plan de Formación Continua para Bomberos que permitiera dotar al personal voluntario de los Parques de conocimientos y experiencia básica en la lucha contra incendios y en la gestión de emergencias antes del inicio de su actividad.

Desde entonces y de forma ininterrumpida, la Diputación ha formado a 540 bomberos y se han registrado más de 1.300 asistencias o matrículas. En total, 1.550 horas lectivas repartidas en 69 cursos.

Por comarcas, ha habido una participación continuada, que ha permitido repartir a profesionales formados por toda la provincia. De la Hoya de Huesca eran el 27 por ciento del total de alumnos, mientras que de la Ribagorza fueron el 17 por ciento, y del Bajo Cinca y del Somontano, el 9 por ciento, respectivamente.

Por su parte, Alto Gállego, Sobrarbe, Jacetania y Cinca Medio han suplido con un 7 por ciento cada uno las clases del plan, y un 6 por ciento eran de La Litera, y un 4 por ciento de Monegros, explica la DPH en un comunicado.