La Audiencia de Málaga ha confirmado la sentencia dictada por un juzgado de lo Penal en la que se condena a un hombre por expulsar de forma violenta a su padre de la casa en la que vivía, en la capital malagueña, amenazándole con un estilete que llevaba en la mano. Así, desestima el recurso de apelación presentado por la defensa.

El juzgado de lo Penal número 11 declaró probado, según la sentencia de la Sala de apelación, que el hombre se dirigió un día de junio de 2010 al domicilio de su padre, en la barriada malagueña de los Asperones, donde sostuvo una discusión con su progenitor, debido a la toxicomanía que padece.

"De forma violenta, teniendo un estilete en la mano, expulsó a su padre del domicilio contra su voluntad", indica la resolución de la Audiencia, a la que tuvo acceso Europa Press, en la que se señala que se marchó del lugar "debido a su estado de agresividad y a fin de evitar que efectivamente se produjese tal agresión".

Así, al acusado se le condenó como responsable de un delito de coacciones, con la atenuante de drogadicción, a una pena de seis meses de prisión y se le prohibió acercarse a su progenitor a menos de 200 metros o comunicarse con él por cualquier medio durante dos años. Frente a esta sentencia, el procesado presentó un recurso.

No obstante, el Tribunal de apelación insiste en que la acción "se dirigió a violentar la voluntad de la víctima obligándole a salir de su casa por la fuerza, amenazándolo con un estilete, con lo que supone asimismo de ataque a un familiar directo", con el que convivía, en este caso el padre, "vulnerable dada su avanzada edad".

Asimismo, la Sala considera que las pruebas fueron "correctamente valoradas" y apunta que, aunque el padre, víctima de los hechos, se acogió a su derecho a no declarar, "es determinante" la manifestación de los policías, que escucharon al progenitor, pero que también vieron al acusado, "dormido junto a la navaja".

Por tanto, se desestima el recurso presentado, añadiendo que no se puede modificar la valoración dada por el juez que ha celebrado el juicio a no ser que "se justifique de algún modo que ha existido error notorio en la apreciación de algún elemento probatorio", lo que "no sucede" en este caso.