Llega el buen tiempo (demasiado pronto y demasiado bueno) y el contacto con la naturaleza apetece más si cabe. Hay corrientes que apuestan claramente por ella para decorar el hogar. Es el caso del diseño biofílico.
Biofilia es, literalmente, amor a la vida. “El diseño biofílico propone reconectar con la naturaleza llevando los elementos y la estética natural al interior de nuestros hogares”, explica Nuno Matos Cabral, Head of Creativity de Gato Preto, que añade que “el diseño biofílico permite que los espacios de nuestro hogar resulten más armónicos, acogedores y relajantes, contribuyendo así a mejorar nuestro bienestar físico y emocional”.
Esto último, lo emocional, ha cobrado relevancia en el último tiempo y,está demostrado que los interiores diseñados para sentir la naturaleza más presente, generan espacios positivos y entornos más apetecibles para vivir. También para trabajar. Por eso la oficina de Amazon en Seattle consiste en tres esferas transparentes con 40.000 plantas y árboles de todo el mundo. En España, las oficinas de BBVA, Telefónica y Sanitas son ejemplos de diseño biofílico.
Pero volvamos al hogar. “Con la llegada de la pandemia, se hizo más evidente la necesidad de reconectar con la naturaleza desde los propios hogares”, apunta Manuel Delgado, Interior Design Manager de Ikea que explica cómo, además, la desconexión con la naturaleza y la vida cada vez más urbana que llevamos, tiene como consecuencia un alto nivel de estrés en nuestro día a día. En este escenario “surge la necesidad de reencontrarnos con nuestros hogares de manera diferente, como lugares que no solo cubren necesidades funcionales sino también emocionales”, afirma, y explica como, en este sentido, el diseño biofílico aporta “espacios calmados, sosegados y en perfecta armonía, que invitan a la relajación”.
En Ikea, conscientes de esta situación, han realizado un estudio sobre bienestar psicológico y felicidad en el hogar, de la mano del Consejo General de la Psicología y la Psicofundación. El estudio ha revelado que hay variables, como el buen estado de la vivienda y que esté ordenada, que reducen la ansiedad y tienen un claro impacto en el bienestar de las personas que la habitan. También es clave para la salud emocional que sea funcional y silenciosa, que tenga cerca espacios naturales, que esté ventilada y se perciba buen olor, y que tenga luz natural. Conclusiones que cuadran bien con el estilo de diseño biofílico. Pero ¿cómo hacer presente la naturaleza en los espacios interiores?
Zona verde
Nuno Matos propone como primera clave “utilizar las plantas para conectar con la naturaleza y tener un aire más purificado”. Además, las plantas sirven para regular la temperatura y aislar del ruido exterior haciendo más confortables los espacios. Manuel Delgado aterriza su uso con varias ideas: “Pon tu asiento favorito junto a una ventana y decora el entorno con distintas plantas. Esto proporciona relax ya que disfrutas de vistas al exterior rodeada de plantas en el interior, mientras lees o escuchas tu música”, asegura. Manuel también propone aprovechar las ventanas para hacer un pequeño jardín colgante:
“Combina plantas que tengan hojas de diferentes formas, tamaños y colores, y colócalas a distintas alturas para crear movimiento”. ¿Otras opciones más sencillas? Pequeños oasis de plantas: “Basta una bandeja y pequeñas macetas con diferentes tipos de plantas. Los cactus son perfectos para esta idea”, apunta. También puedes dar un toque de naturaleza en tu hogar “con un jarrón o un bote de vidrio, agua y unas hojas o unas flores que te alegrarán el día y darán luminosidad a tu casa”.
Que pase la luz
Subir persianas, retirar cortinas, abrir ventanas… es otra de las claves. Dejar que entren el aire y la luz natural. La luz es fundamental en el diseño biofílico, sobre todo la natural que se propone como protagonista en los espacios. “Pero la luz artificial que utilicemos como complemento, también debe ser estudiada al detalle, apostando por las tonalidades más amarillas que resultan más cálidas”, recomienda Nuno Matos. Natalia Zubizarreta, interiorista y experta en la relación entre emociones y espacios, afirma que “las luces cálidas nos vinculan a la cueva, al calor del fuego. Nuestro cerebro más primitivo manda la señal de que estamos a salvo y eso se traduce en relax y bienestar”.
Materiales naturales. “Hay que apostar por materiales y fibras naturales tanto en los muebles como en los textiles”, afirma Nuno Matos. Por eso, en este tipo de decoración abundan la madera, el cuero, el corcho, las fibras vegetales (bambú, mimbre…), los tejidos naturales (algodón, lino…), los tonos tierras y verdes…
Sobre el mobiliario, Franck Galibert, director de colección de Habitat recomienda apostar por la calidad frente a la cantidad: “Materiales buenos y bellos que resisten en el exterior y además se adaptan al interior”. También aconseja atender a la funcionalidad: “El tamaño de las viviendas nos obliga a pensar en muebles multifuncionales que puedan acompañarnos en la terraza en verano y, en invierno, lucir bonitos en el interior”, y explica que en Habitat se preocupan por crear muebles que puedan acompañarnos a lo largo de nuestras actividades domésticas: “Lo llamamos mobiliario nómada y suele ser de aluminio, roble aceitado, bambú o teca, ya que son ligeros y fáciles de transportar”.
La estética también es importante en el biodiseño y Franck Galibert recomienda seleccionar piezas inspiradas “en los interiores más bohemios y en la tendencia wabi sabi”. Natalia Zubizarreta apuesta por la madera en los interiores: “Aporta calor al hogar y es como un abrazo”, afirma y asegura que las maderas en tonos claros, deslavados, no cansan nunca y siempre aportan calidez al hogar. Recomienda combinarla con fibras naturales: Linos, algodones, lanas… “Traerán paz, armonía y buen rollo a tu hogar y, por extensión, a tu vida”, declara. Los revestimientos de piedra o con acabados de cal o arcilla también están cada vez más presentes fuera de los entornos rurales. “Tampoco podemos olvidar incluir en los interiores motivos inspirados en la naturaleza”, recuerda Nuno Matos. Papeles pintados con motivos vegetales o estampados florares en los textiles serían algunas concreciones.
Si hemos decorado con todas estas claves y, además, disponemos en nuestro hogar de un patio o terraza debemos acondicionarlo para habitarlo. Esto ayudará a que pasemos del interior al exterior, y viceversa, sin apenas notarlo.
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