Ford Escape S

Para ponerse en marcha, el motor del Ford utiliza gasolina como combustible en un depósito de 57 L. En el recorrido su consumo medio es de 8,333 l gastados por cada 100 kilómetros recorridos, una cifra muy elevada solo para aquellos conductores que no dan importancia a este dato y dan más prioridad a otras características.

Además, este vehículo esconde debajo del capó un motor de gasolina con una potencia absoluta de 168 CV, situado en la media potencial de automóviles.

Incluye además un maletero de 971 L de capacidad. El sistema de conducción es de transmisión automático, lo que representa grandes beneficios para el usuario. Desde una conducción más cómoda, práctica y deportiva, hasta poder deleitarnos con de las conducciones más seguras en la actualidad: al tener una menor dependencia de los pedales y la palanca, podemos concentrarnos en el tráfico. Además, contar con un coche automático tiene un impacto positivo sobre el consumo de combustible, ya que los cambios se realizan, entre otros motivos, buscando el máximo rendimiento.

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