Para que una terapia pueda considerarse eficaz y segura, debe haber evidencias científicas que la avalen. El ministerio de Sanidad lucha contra estas técnicas, ya que en el mejor de los casos pueden suponer un perjuicio económico y, en el peor, tener riesgos para la salud.
El reiki se basa en un concepto, la 'energía vital', que es ajeno al método científico. Por ello, no tiene base científica y no parece que sea más efectivo que el placebo.
Bajo la lupa desde la puesta en marcha del Plan para la Protección de la Salud frente a las Pseudoterapias, esta práctica es una de las 73 analizadas que no cuentan con el aval científico requerido que garantice la eficacia de sus resultados ni la seguridad de los pacientes.
Usada con pretendida finalidad sanitaria, no existe evidencia científica de que la gemoterapia sea efectiva, lo que ha hecho que asociaciones como la OCU se encarguen de poner esto en conocimiento, para evitar que se use como sustituto de otro sistema efectivo para solucionar los problemas de salud.
"Debemos evitar esos contenidos", reconoce José Manuel Tornero.
En el programa 'Obrim fil' se propuso arrojarle a un perro callejero una bola hecha con la foto de su madre mojada en leche para eliminar sus verrugas.