Estos trabajadores apenas cuentan con apoyo psicológico y muchos de ellos se ven obligados a pedir la baja tras largas jornadas visionando asesinatos, decapitaciones, suicidios en directo...
Los ciberdelincuentes que se hacen pasar por los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado piden a sus víctimas que faciliten datos personales con una justificación para su defensa en un plazo de 72 horas para no entrar a la cárcel.
Unos ciberdelincuentes están mandando correos electrónicos haciéndose pasar por la Policía Nacional para meter miedo a las víctimas sobre supuestos delitos que han cometido y conseguir que den datos personales.
Los delincuentes suplantan a la Policía Nacional enviando correos electrónicos con el objetivo de extorsionar a sus víctimas acusándoles de posesión de pornografía infantil, pedofilia, ciberpornografía y exhibicionismo.