
- Las protestas, convocadas por movimientos opositores, han tenido lugar en 260 ciudades de Brasil, incluidas Brasilia y todas las capitales regionales.
- El escándalo de corruptelas en Petrobras y las turbulencias en la economía han afectado la popularidad de la presidenta del país.
- El Gobierno brasileño ha dicho que observa esas protestas con "respeto" y que las percibe como una prueba de la "normalidad democrática".