"No pude ir hasta el final. Renuncié a activar mi cinturón. No por cobardía, no por miedo. Porque no quería, es todo", ha dicho el único superviviente del comando que provocó 131 muertos y 414 heridos.
Admite que mintió a sus cómplices cuando les aseguró que el mecanismo de los explosivos no funcionó.
"No deseo responder a ninguna pregunta (...). Se me acusa, aquí estoy. aMi silencio no me hace culpable ni criminal, es mi defensa", dijo el presunto yihadista
Es el único superviviente de los comandos yihadistas que atacaron París el 13 de noviembre de 2015.
Abdeslam está acusado en Bélgica de "intento de asesinato de varios policías en el contexto de una acción terrorista", por un tiroteo en Bruselas en 2016.