La agencia espacial detalló hace un par de años que los retrasos con la fabricación de los trajes podrían suponer un cambio en la programación del proyecto que llevará el ser humano de nuevo a la Luna.
Tras seis meses de investigación, los cuatro astronautas que partieron a la Estación Espacial Internacional vuelven a casa el mismo día que el cohete fabricado con impresión 3D volverá a intentar alzar el vuelo.
A raíz que el lanzamiento de la misión tripulada de Artemis rumbo a la Luna se acerca, la creación de un huso horario propio se vuelve más relevante, ya que facilitaría la exploración espacial.
Los cuatro astronautas que llegarán mañana a la plataforma orbital internacional permanecerán ahí durante seis meses y se espera que realicen unas 200 investigaciones en total.
El vuelo estaba programado inicialmente para el domingo, pero la empresa y la agencia decidieron en una reunión retrasarla un día para hacer las pruebas de preparación necesarias.
La agencia espacial rusa ya anunció a finales de 2022 una fuga refrigerante en Soyuz MS-21, que afectó a caminatas espaciales. Ahora, el problema ha ocurrido en un carguero enviado a la EEI el octubre pasado.
Los miembros de la tripulación de la estación espacial china instalaron componentes nuevos en la aeronave, concretamente, válvulas de extensión en el módulo de laboratorio.
La NASA ha iniciado un proyecto junto al DARPA para desarrollar dicha tecnología, que esperan que permita realizar viajes espaciales más rápidos, eficaces, seguros y con más carga.
La idea inicial era que los tres tripulantes regresasen en la cúpula rusa, pero finalmente no será así para mitigar su humedad y reducir la temperatura.