El retrovisor
Los retrovisores oficiales de la marca pueden superar los 100 euros, mientras que las versiones de desguace se encuentran incluso por 30. Merece la pena echar un vistazo.
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Las luces
Los focos, faros... Los coches no suelen acabar en el desguace por fallos en estas piezas así que no está mal darles una oportunidad. Las luces más caras pueden costar hasta 100 euros y en los desguaces se encuentran al 70%.
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El turbo
Pueden encontrarse reacondicionados por un precio un 80% más barato que el original. Rondan entre los 100 y los 200 euros.
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El motor
La verdad es que no está de más echar un vistazo en el desguace para sustituir nuestro motor del coche si se ha averiado. El precio está en unos 200 euros (dependiendo del modelo de coche) mientras que un motor nuevo ronda los 800 y los incluso 2.000 euros.
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Los cristales o lunas
Es fácil que una luna acabe rota. Las reparaciones de los cristales pueden acabar costando 400 euros, por lo que es mejor mirar si en los desguaces hay cristales en buen estado, donde puede costar unos 70 euros.
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Componentes eléctricos
Algunas piezas, como los elevalunas eléctricos, salen mucho más baratas en un desguace. En este caso, la diferencia puede ser de incluso 100 euros.
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Los asientos
Si crees que es hora de cambiar los asientos de tu coche, un desguace es una buena opción. Piensa que solo tapizar de nuevo tus asientos puede llegar a costar 990 euros y uno 'nuevo', apenas 100 euros.
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