Usar niños para ganar fama

Hay gente que está dispuesta a casi todo para ganar fama y seguidores en las redes sociales, pero deberían existir ciertos límites. Uno de ellos, sin duda, el de utilizar a niños menores para ello.

Usar animales para la investigación

Existen muchas restricciones legales sobre la utilización de animales para la ciencia y la investigación. No obstante, los animalistas consideran que son insuficientes y que deberían ser más estrictas.

Los modelos infantiles

Lo vemos tan a menudo que nos resulta normal el que niños participen en campañas de moda o de publicidad. Sin embargo, no deja de ser una forma de explotarlos y de sexualizarlos.

El monopolio tecnológico

Aunque cada vez más países tratan de establecer un control, las principales compañías tecnológicas del mundo pertenecen a un reducido grupo de empresarios. Con el tiempo, además, este monopolio ha ido a más.

Grabar a desconocidos

Desde que el ‘smartphone’ se convirtió en un elemento indispensable e inseparable en nuestras vidas, no dejamos de fotografiar y de grabar vídeos continuamente. Muchas veces captamos a personas desconocidas, lo cual resulta bastante controvertido.

La prensa sensacionalista

Mucha gente dentro del propio periodismo lo entiende más como un negocio que como una labor social. Eso provoca que la prensa sensacionalista no deje de ganar terreno superando, en ocasiones, límites que deberían estar prohibidos.

Grabar accidentes

El ser humano es curioso por naturaleza y, a veces, se llega con una facilidad pasmosa al morbo. Ocurre, por ejemplo, cuando se graban imágenes de accidentes incluso mientras se lleva a cabo la atención médica para después difundirlas por las redes sociales.

Llamar a las casas para vender algo

Que alguien se presente en casa sin avisar ya es bastante molesto, especialmente si se trata de un desconocido. Si además lo que quiere es venderte algo, recaudar dinero para algún motivo o hablarte de religión puede resultar de lo más desagradable.

Matrimonio infantil

Según UNICEF, el matrimonio infantil (aquel entre un niño y un adulto) sigue siendo una práctica generalizada. Y es que en muchos lugares del mundo apenas existe control.

Sentarse al lado de alguien

Se trata en realidad de una cuestión de respeto, pero hay tantas personas que se sientan al lado de otras en el transporte público habiendo muchos asientos vacíos que hay quien cree que debería estar regulado.

Cosas extrañas

Un hilo de Reddit señala situaciones extrañas que quizás no deberían estar permitidas.