Una piscina llena de inodoros

Más allá de que no tenga agua, el hecho de que esté llena de urinarios no deja en muy buen lugar a este establecimiento. Para no volver nunca.

Un cuadro perturbador

Situado en la recepción del hotel, parecen pelos humanos colocados ahí a propósito.

Un pasillo sangriento

La alfombra es muy inquietante. Parece que el carrito ha atropellado a alguien y va dejando el rastro de sangre por los países.

Un papel poco higiénico

Un huésped encontró este rollo de papel en el aseo de la habitación del hotel. Muy higiénico no parece.

Un balcón peculiar

Ofrecer una terraza en la habitación cuando ni siquiera puedes poner un pie en él es algo cuestionable...

Nevera de bolsillo

Este alojamiento se tomó muy en serio la petición de una pequeña nevera.

Un aseo indiscreto

Más allá de que no se disponga de mucha intimidad en el baño, lo cierto es que las vistas desde la cama tampoco son agradables.

Enchufe 'compartido'

Lo de compartir enchufes con la habitación de al lado es algo que no se veía venir.

Vistas al mar

Aunque el anuncio no miente, lo cierto es que decir que desde el alojamiento se ve el mar es un poco optimista. 

Manchas sospechosas

Desde luego no es nada tranquilizador dormir en esta habitación con esas extrañas manchas de color rojo en el suelo...

Una luz que hace aguas

No da mucha confianza este foco de cara a permanecer en el hotel demasiado tiempo.

Ventana sin vistas

La diferencia entre tener ventana o no tenerla en este caso no existe.

Cosas horribles

Algunos hoteles nos pueden sorprender por su decoración terrible y por algunos otros elementos.