
Canal junto al estanque
Pocos artistas actuales se inspiran en este legado del pintor moderno. Una mirada soñadora y melancólica que puede comportar un drama existencial que sigue siendo de gran actualidad.
TOMÁS BALEZTENA
Palacio de Cristal a las 6 am
El uso de la pincelada y el color captura el paisaje de una forma singular, creando una sensación onírica donde cobra relevancia el estudio de la luz y del agua.
TOMÁS BALEZTENA
Charca de nenúfares en el Jardín Botánico III
Son naturalezas que pudiendo definirse como muertas son, a un tiempo, de una vitalidad radiante donde el espectador trata de establecer una lectura poética.
TOMÁS BALEZTENA
Fuente del Ángel Caído
La imagen del Ángel caído, según Espacio Valverde, "se convierte en un símbolo en el que se quisiera reconocer al hombre, extendiendo en la noche sus alas al cielo".
TOMÁS BALEZTENA
Rosaleda del Retiro a la luz de la luna
Los ocasos y las noches en las que detiene el tiempo de sus óleos crean un ambiente íntimo a las escenas que el artista le dedica a lugares tan emblemáticos como el Retiro.
TOMÁS BALEZTENA
Jardín del Parterre a la luz de la luna
Bocanadas de luz y de color se repiten en múltiples imágenes de vegetación, de agua y de vida, contraponiendo el mundo del día con el de la noche.
TOMÁS BALEZTENA
Vista sobre el canal
Los cuadros, de buen tamaño, no sólo representan paisajes íntimos, también perspectivas que pueden hacer que el espectador se vea tumbado en la quietud de los parques madrileños.
TOMÁS BALEZTENA