En Andalucía hay 977 policías nacionales y guardias civiles menos que en el año 2011, cuando el PP llegó al Gobierno central, lo que supone un descenso del 3,44 por ciento, al tiempo que las infracciones penales en el campo andaluz han subido un 6,37 por ciento, según datos presentados por el Ministerio de Interior en el Congreso a los que ha tenido acceso Europa Press.

Los datos facilitados por el departamento de Jorge Fernández Díaz, a raíz de varias preguntas del portavoz del PSOE y diputado por Málaga, Miguel Ángel Heredia, recogen que en el conjunto del país hay 5.504 policías y guardias civiles menos que hace dos años, una caída del 3,54 por ciento. El número de efectivos ha descendido en todas las provincias españolas a excepción de cuatro —Teruel, Soria, Girona y Tarragona— que tuvieron incrementos muy leves.

En Andalucía el número de efectivos de la Policía Nacional pasó de 12.976 a finales de 2011 a 12.474 a finales de 2013, un total de 502 agentes menos y un descenso del 3,87 por ciento; registrando las provincias de Huelva y Córdoba los descensos más significativos 6,68 y 6,49 por ciento, respectivamente.

En lo que se refiere a la Guardia Civil, hay 475 efectivos menos que en 2011, un 3,08 por ciento menos; un descenso en el que destaca el caso de la provincia de Jaén, que ha perdido 101 guardias en dos años.

Otro de los datos aportados por Interior es el descenso en el presupuesto para combustible, en un cinco por ciento, y la pérdida de 108 coches policiales en Andalucía, según los datos del diputado socialista, que los ha contrapuesto con el aumento de los robos con violencia en domicilios y los robos en el campo. Concretamente, sobre estos últimos, la información de Interior aporta que las infracciones penales en las explotaciones agrícolas andaluzas pasaron de 7.743 a 8.236 en dos años, un incremento del 6,37 por ciento.

A la vista de los datos, el PSOE denuncia que "nunca se ha reducido tantos efectivos en tan poco tiempo" y Heredia ha manifestado su "preocupación" a la vista de que "esos recortes se traducen en un descenso en la seguridad de los ciudadanos".

Además, ha lamentado que el Gobierno "apueste por la seguridad privada, como pone de manifiesto su Ley de Seguridad Ciudadana" con la que, según ha incidido, "ganan las empresas pero pierden los ciudadanos".