El candidato presidencial republicano John McCain ha calificado como "adversario formidable" a su oponente Barack Obama, quien logró este miércoles la candidatura demócrata, y alabó a Hillary Clinton de la que destacó su "tenacidad y valor".

McCain, en un discurso pronunciado en Nueva Orleans, se distanció del presidente estadounidense, George W. Bush, y declaró el comienzo de las elecciones generales. "Oirán en cada discurso, entrevista y comunicado de prensa de mi oponente que me presento al tercer mandato de Bush. ¿Por qué el senador Obama cree que es tan importante repetir esa idea? Porque sabe que es muy difícil hacer que los estadounidenses se crean algo que es mentira", explicó McCain.

A su vez, el candidato republicano, que actuó como telonero de la gran noche electoral demócrata, subrayó el hecho de que ambos han discrepado en varios temas como por ejemplo la guerra de Irak, y el tratamiento que deben recibir los detenidos por terrorismo, así como por el cambio climático o la política energética.

Sobre Clinton dijo que "merece mucho más aprecio del recibido en ocasiones (...), me siento orgulloso de poder llamarla mi amiga".

"Preparado para el reto"

Por otro lado, subrayó que los "entendidos y los veteranos del partido han declarado que el senador Obama sea mi oponente. Un adversario formidable. Estoy preparado para el reto, y preparado para esta carrera de una manera que acredite nuestra campaña y enorgullezca a nuestras personas dignas, patrióticas y decentes".

En alusión a Obama destacó, entre jaleos a su nombre que, a diferencia de su persona, al candidato demócrata "lo están empezando a conocer ahora". "Los estadounidenses deberían estar preocupados sobre las creencias de un candidato que dice que está preparado para hablar, en persona y sin condiciones con los tiranos desde La Habana hasta Pyongyang, pero que no ha viajado hasta Irak para reunirse con el general David Petraeus, y ver sobre el terreno el progreso que amenaza con revertir", dijo McCain.

El candidato republicano también dijo saber que los estadounidenses están "cansados de la guerra" en Irak pero que la política en la zona que defiende Obama les llevaría "a una contienda más amplia con mayores sacrificios, alejar la paz y poner a Estados Unidos en peligro otra vez".