En la rueda de prensa posterior a la reunión del Consejo de Gobierno, Vázquez ha manifestado que no se ha recibido ninguna llamada del Partido Popular pidiendo disculpas por los hechos y ha expresado su preocupación por la "deriva radical" de esa formación, que ha "perdido los papeles y que está demostrando una falta de liderazgo alarmante".

Ha agregado además que el PP-A cuenta con un presidente interino, que "no tiene la fuerza suficiente para hacerse oír en su organización".

Ha indicado que estamos ante un "acoso en toda regla", donde hubo una concentración en la puerta del hotel donde se alojaba la presidenta de la Junta, un bloqueo al paso de la comitiva oficial o un escándalo al término de la celebración del X aniversario del Museo Picasso, así como una "descalificación impresentable" de la Policía por parte de algunos dirigentes del PP e "insultos intolerables" vertidos por cargos públicos de ese partido contra Susana Díaz.

Vázquez ha considerado razonable la "salida" en el día de ayer del ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, condenando estos hechos, mientras que el PP-A se ha "echado al monte". "Esa actitud de casi algarada callejera no representa a un partido con vocación institucional", ha indicado.

El portavoz ha insistido en pedir al PP-A que no actúe como una fuerza política antisistema y reconozca su error, rectifique y pida disculpas. Ha indicado que si no rectifica, no va a poder pasar la página, porque desde la Junta se le va a estar recordando todos los días esos hechos.

Ha indicado además que la Junta está muy "quejosa" con la actuación de la Subdelegación del Gobierno en Málaga y de la Delegación del Gobierno en Andalucía, que son los responsables de velar por la seguridad y custodios de determinada información "que casualmente llegó a los alcaldes que protestaron en la puerta del hotel".

Ha señalado que la Junta quiere saber qué ha ocurrido ahí y abundar en determinadas cuestiones en materia de seguridad, que son muy preocupantes, apuntando que un subdelegado del Gobierno no puede jugar a hacer política partidaria, sino que es el responsable de la seguridad en la provincia.

Ha querido dejar claro además que el Gobierno andaluz nunca ha sido "tibio" con los escraches, "ni antes ni ahora" y los condenó cuando algunos miembros del PP los sufrieron. "Cuando los sufre la presidenta de la Junta estamos con toda la autoridad moral y legitimidad para expresar nuestro rechazo frente a los escraches", ha expresado.