Alcaldes y concejales socialistas de Salamanca han pedido a la Junta de Castilla y León que convoque la Comisión Técnica del transporte metropolitano para que se traten los problemas de este servicio que conecta la capital de la provincia con su alfoz.

El líder de la oposición socialista en el Ayuntamiento de Santa Marta de Tormes, Francisco Javier Rodríguez, ha lamentado que el Ejecutivo regional haya metido "en la nevera" la situación de este transporte público para dejarlo "sin medidas" hasta después de las elecciones autonómicas de 2015.

Por su parte, la alcaldesa de Doñinos, Carmen García, ha criticado que no haya intención de convocar la comisión, que se creó hace un año, hasta pasados los comicios municipales y autonómicos que, en principio, tendrán lugar dentro de dos años.

Asimismo, la máximo responsable del Consistorio de Doñinos ha lamentado, en esta misma línea, que el alcalde de Salamanca, Alfonso Fernández Mañueco, "se niegue a hablar" del transporte metropolitano en el Consejo de Alfoz de Salamanca, cuando fue "uno de los principales temas" que anunció que se tratarían en la agrupación salmantina del entorno de la capital.

Javier Rodríguez, quien también ha estado acompañado por otros representantes del PSOE en ayuntamientos salmantinos afectados por el transporte metropolitano, ha añadido que si no se convoca la conferencia se quedarán "en el aire" asuntos que preocupan a los municipios del entorno de la capital.

En su caso, ha puesto como ejemplo, los "problemas" que tiene Santa Marta en este servicio. Uno de ellos es la petición de una tercera línea que pase por el nuevo edificio administrativo de la Junta de Castilla y León y por la estación de trenes de Salamanca, y otro las necesidades de paradas, más allá de las propuestas por el Ayuntamiento de la capital.

Finalmente, ha criticado que en Santa Marta se den casos de "hacinamiento" de pasajeros a determinadas horas. En este sentido, también ha criticado que la empresa pida a los ayuntamientos que paguen lo suficiente para que no haya pérdidas, mientras que consistorios como Santa Marta vean como sus líneas crean superávit y esa cantidad se la quede la empresa concesionaria.