Según el vicealcalde, la inundación en de la M-30 se produjo por una "avería" en un colector "concreto" que se saturó, por lo que "lo importante" es conocer la causas técnicas de esta saturación.

Cobo no precisó cuándo estarán listas las conclusiones de este informe, ni quién asumirá el coste económico de la avería, pero si ha insistido en que se trata de un fallo muy "concreto" y no afecta al funcionamiento general de la recién estrenada reforma de la M-30, en tanto que en el 99% de la vía "no hubo ningún problema".

El hecho de que estas primeras lluvias de la temporada hayan sido "tan excepcionales", por la fuerza con la que cayó el agua y por el granizo del que vino acompañada, es un "elemento" a tener en cuenta para entender la inundación que tuvo lugar en la M-30 y en otros puntos de la ciudad y de la Comunidad, dijo el vicealcalde.

Los arquiectos dudan

Esta opinión no es compartida por los expertos en urbanismo de la región. Según Ricardo Aroca, uno de los arquitectos consultados por 20 minutos.es, "lo de la M-30 no tiene la más mínima excusa y no debería inundarse bajo ningún concepto. Está claro que quien lo hizo no empleó las variables correctas para calcular la capacidad de los colectores", explica.

Según Aroca, "el problema es que hay que hacer un análisis completo del sistema de alcantarillado de Madrid. Una reforma y una remodelación exhaustiva, lo que llevaría ocho o diez años", afirma.

Por su parte, la delegada de Medio Ambiente del Ayuntamiento de Madrid, Ana Botella, subrayó que las inundaciones que sufrió la M-30 se dieron también en el Metro, y aseguró que las infraestructuras madrileñas son "espléndidas".

A su juicio, "la obra de la M-30 es una de las obras más importantes que se han hecho nunca en Madrid", agregó.