El presidente de la Confederación de Empresarios de Comercio de Castilla y León (Conferco), Juan Manuel Muñoz, ha expresado hoy su frontal oposición a una posible liberalización de horarios comerciales que supondría la aprobación, por parte de la Junta, de las llamadas Zonas de Gran Afluencia Turística (ZGAT), y ha vaticinado que de salir adelante supondría "la puntilla" para el comercio minorista al que representa.

Muñoz se ha pronunciado en tales términos a la conclusión del encuentro que, con carácter monográfico sobre los ZGAT, han mantenido representantes de los tres formatos comerciales, Conferco, en representación del comercio minorista; Asucyl, que agrupa a las cadenas de supermercados El Árbol, Gadis, Mercadona, Lupa, Alimerka, Froiz, Suma, Spar y Covirán, y la Asociación de Grandes Empresas de Distribución (Anged), sin que el mismo sirviera para reducir las "grandes diferencias" que separan a unos y otros.

En la reunión, el presidente de Conferco ha sido taxativo al mostrar su postura en contra de los denominados ZGAT, que, en declaraciones a Europa Press, "supone abrir una puerta falsa hasta llegar a la liberalización total de horarios comerciales, y el comercio minorista no está por la labor".

La negativa la ha justificado en el hecho de que el colectivo, caracterizado por contar con cero o tres trabajadores, no puede competir con el gran formato si se da vía libre a la apertura los 365 días del año puesto que para ello tendría que ampliar plantilla, "y ello supone dejar de ser competitivos".

Un trasvase del flujo de compras

En su opinión, la ampliación de horarios supone cambiar y modificar deliberadamente el flujo de compras, un trasvase al domingo de las que se hacen entre semana.

"El titular lo ha dado el Carrefour de Ávila cuando dice que el domingo ha pasado a ser el segundo día de la semana en compras", ha incidido Muñoz, quien, pese a reconocer que la ley está para cumplirla, ha recordado a la Consejería de Economía y Empleo, encargada de autorizar los ZGAT, que lo que defiende Conferco es "cumplir con el equilibrio comercial, principio de la ley en vigor, para que todos los formatos puedan coexistir".

Y es que Muñoz tiene muy claro que de salir adelante la pretendida liberalización de horarios comerciales, el colectivo al que representa recibirá la "puntilla. Está clarísimo que, y ello sin meterme a gobernar ni legislar, que esto se lleva por delante al comercio minorista", a lo que ha añadido que está demostrado que esas nuevas reglas del juego "ni crean empleo ni riqueza".