Un vecino de Oviedo de 54 años acusado de intentar abusar sexualmente de su hijastra, de 16 años, negó hoy los hechos durante la vista que se celebró a puerta cerrada en la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Asturias, informaron a Europa Press fuentes jurídicas. El juicio quedó visto para sentencia.

Durante la sesión, en la que la menor prestó declaración separada del acusado por un biombo, las partes elevaron a definitivas sus conclusiones provisionales. La Fiscalía le considera responsable de un delito continuado intentado de abusos sexuales por el que pide para él cuatro años de cárcel, una orden de alejamiento durante seis años y una indemnización de 6.000 euros a la menor por los daños morales.

La acusación particular eleva la petición hasta los ocho años de prisión al considerar que se trata de dos delitos diferenciados, mientras la defensa niega los hechos y solicita la libre absolución al entender que no existen pruebas, más allá de la declaración de la supuesta víctima, que este año cumple la mayoría de edad.

Los hechos

Según el escrito de calificación del Ministerio Fiscal, los hechos se produjeron un fin de semana de junio de 2008, cuando el hijo del acusado y las dos hermanastras de éste, nacidas en 1992 y 1993, estaban en el domicilio del procesado, de acuerdo a un pacto adoptado por la pareja tras la ruptura de su relación sentimental, en diciembre de 2007.

De acuerdo con el texto, la noche del 6 al 7 de junio el procesado se introdujo en la cama en la que dormía una de las niñas, le retiró la ropa interior y se masturbó con la mano de ésta. A continuación, se colocó sobre la menor y trató de abusar sexualmente de ella, que fingía estar dormida "por miedo a la reacción del procesado", hasta que la víctima despertó a su hermano con un movimiento.

En iguales circunstancias, el acusado repitió la operación la noche del 14 al 15 de ese mismo mes. Siempre según la Fiscalía, se aprovechó tanto de estar en su domicilio, como de la ausencia de otros adultos. Asimismo, se sirvió del ascendente que tenía sobre la menor, quien le consideraba "como su propio padre".