Sareb, el conocido como "banco malo", ha vendido hasta mayo más de 700 viviendas, cifra que se incrementa de forma exponencial cada mes, según ha anunciado este martes la presidenta de la sociedad, Belén Romana. Esta cifra supone el 1,2% de las 55.700 viviendas que el Sareb tiene en cartera.

El dato está lejos del objetivo de Sareb de desprenderse en cinco años de 45.000 viviendas, pero Romana ha dicho en el IV Encuentro sobre la Reforma del Sistema Financiero, organizado por Expansión y KPMG, que el ritmo de ventas de cada mes dobla al del conjunto de meses anteriores.

Además, ha augurado que este crecimiento exponencial seguirá viéndose en el futuro. Y será necesario ver ese crecimiento exponencial, ya que a este ritmo de ventas, necesitaría el Sareb 26 años, hasta 2039, para vender su stock de viviendas y unos 21 años para vender esas 45.000 fijadas.

A ello contribuirá no sólo la firma de acuerdos de financiación con la banca sino también la creación de Fondos de Activos Bancarios (FAB), unos instrumentos creados de manera conjunta con inversores institucionales, y que permitirán vender los activos inmobiliarios en manos de Sareb en competencia directa con las entidades cedentes.

La presidenta del "banco malo", ha anunciado que la sociedad creará su primer FAB para cerrar la venta de la cartera "Bull", que incluye inmuebles terminados y en construcción en Andalucía y Valencia, por un valor algo inferior a los 100 millones de euros.

En las negociaciones para vender a grandes inversores la cartera "Bull", Sareb ha constatado el interés de todos ellos por disponer de un FAB, por lo que la sociedad inmobiliaria creará una empresa conjunta con quien compre estos activos, que posteriormente se intentarán vender en la red minorista, compitiendo con otros que ahora tratan de colocar los bancos o las propias inmobiliarias.

A juicio de Romana, esta decisión permitirá dinamizar las ventas minoristas, dado que los fondos de inversión interesados en la cartera "Bull" son gestores especializados y con estrategias agresivas de venta.

Los FAB son unos instrumentos exclusivos de Sareb, dado que no pueden ser creados por ninguna otra entidad y con ventajas fiscales, pues tributan sólo al 1% en el Impuesto de Sociedades.

Además, si el inversor es extranjero está exento del pago del impuestos en los beneficios que obtenga, siempre y cuando Sareb permanezca en el capital del FAB.

Además de "Bull", Sareb está preparando el lanzamiento de otras carteras para el segundo semestre del año con préstamos, así como locales comerciales, suelos y vivienda, entre otros.

Por último, la presidentel del 'banco malo' ha querido aclarar algunos 'mitos' sobre su entidad. "Sareb no es un banco, pero tampoco es la mayor inmobiliaria de Europa, dado que el 80% de sus activos son préstamos, no inmuebles. Además, Sareb no tiene hipotecas de particulares ni es una agencia pública de vivienda social. Nuestro objetivo único y fundamental es liquidar nuestra cartera y desaparecer", ha añadido.

Por su parte, el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, ha dicho que aunque en el segundo trimestre del año, la economía española tendrá un crecimiento negativo, estará "muy próximo a cero", en el tercero, "podríamos estar ya en torno a cero o incluso con una tasa positiva".

"Nuestra estimación es que el segundo trimestre del año sea menos malo que el tercero, con cifras menos negativas y aproximándonos a cero", ha dicho Latorre.

La previsión del Gobierno para el tercero es que continúe esa mejora y que por lo tanto, "estemos ya en torno a cero, pero con signos positivos", ha concluido.

Las declaraciones de Latorre están en sintonía con las de otro participante en este encuentro como es el gobernador del Banco de España, Luis Maria Linde, que ha asegurado que la economía estará "muy cerca" de dejar de tener un crecimiento negativo.

En su intervención Linde se ha mostrado partidario de que sean las propias entidades financieras las que decidan en qué momento un determinado activo puede considerarse "deteriorado" y reflejarlo adecuadamente en su balance.

Durante su intervención, Linde ha recordado que los organismos reguladores han alcanzado un acuerdo sobre el deterioro de los activos financieros y las provisiones por riesgo de crédito, en la que se contemplan dos posibilidades.

En uno de ellos, del que es partidario el Banco de España, es la propia entidad la que decide cuándo computar un activo como deteriorado; en el segundo, se adelanta el registro de las pérdidas, aceptando además pérdidas esperadas o estimadas, calculando sobre eventos futuros.

Según Linde, es más conveniente dejar "esta discrecionalidad al criterio de la entidad".