El transporte de mercancías ha convocado huelga durante varios días de junio e indefinida a partir del 2 de julio por la "actitud intransigente" de la patronal y el "peligro de quedarse sin regulación laboral" el próximo 7 de julio, según han indicado los sindicatos CCOO y UGT en un comunicado.

La huelga se convoca para forzar el acuerdo que permita el mantenimiento del convenio y de sus derechos. Está convocada para los días 19, 20, y 21 de junio e indefinida a partir del día 2 de julio.

Desde los sindicatos se ha indicado que como consecuencia de la reforma laboral y la actitud "intransigente" de la patronal, el transporte de mercancías por carretera de la provincia de Valencia "se quedará sin un convenio colectivo que regule de forma homogénea sus condiciones laborales, si no se alcanza un acuerdo antes del 7 de julio". El sector emplea a 10.000 trabajadores en la provincia.

Esta situación conllevará a la generalización del salario mínimo interprofesional (641 euros/mes de salario), así como la aplicación de una regulación laboral de mínimos. CCOO ha afirmado que ese es el objetivo que "persiguen muchos empresarios del sector, aun a sabiendas del perjuicio de competencia desleal que generará la inexistencia de unas condiciones laborales comunes para todas las empresas".

Jornada de lunes a domingo

Ambos sindicatos han indicado que el empresariado lleva un año y medio realizando propuestas "inaceptables" en la mesa de negociación, "despreciando las sucesivas propuestas sindicales sobre moderación salarial (acorde con lo pactado entre CEOE, UGT y CCOO) y flexibilización de la jornada para poder llegar a un acuerdo".

CCOO ha manifestado que "a pesar de todo ello, la patronal no tiene límites y reclama unas condiciones inaceptables" como son la jornada ordinaria de lunes a domingo; congelación salarial durante toda la vigencia del convenio ("incumpliendo las tablas salariales firmadas de 2011"); suprimir la antigüedad; eliminar los complementos por baja; y la pérdida de vigencia del convenio transcurridos 12 meses desde su fin.

Por su parte, los trabajadores exigen: un salario digno, una jornada semanal que permita la conciliación, el mantenimiento de los derechos sociales y la vigencia del convenio hasta que no se alcance uno nuevo.

Entre otras consecuencias, la convocatoria de huelga "puede provocar problemas de abastecimiento en las grandes superficies, supermercados y al sector industrial, muy especialmente al del automóvil, además de alterar el funcionamiento del puerto de Valencia", han adelantado los sindicatos.