Una mujer de 44 años, Ana Isabel Azagra, "ha podido confirmar" gracias a un análisis de ADN realizado en el laboratorio Neodiagnóstica, su relación de filiación con una mujer también valenciana "que dio a luz siendo menor de edad en la Casa Cuna Santa Isabel de Valencia donde se produjo el parto el 18 de febrero de 1969" y donde supuestamente le dijeron "que había tenido un hijo varón pero que había fallecido durante el nacimiento".

El abogado de la organización SOS Raíces, Enrique Vila, en un comunicado, ha informado de que la madre "fue sedada para el alumbramiento y al despertar supuestamente le mintieron diciéndole que había tenido un hijo varón pero que había fallecido durante el nacimiento".

Así, ha apuntado que el bebé, "que en realidad fue una niña, fue adoptado por otra familia valenciana a la que le hicieron creer que aquella pequeña había sido abandonada".

Vila ha asegurado que, "de confirmarse todos los extremos de esta historia, habríamos encontrado la causa que explicaría por qué hasta ahora desde Casa Cuna Santa Isabel se han negado, incluso bajo orden judicial, a facilitar los nombres de las madres a muchos otros adoptados que nacieron en esta institución".

Por otro aldo, ha explicado que el primer contacto entre la mujer que fue adoptada y su familia biológica, compuesta además de por la madre por cuatro hermanos, se produjo hace mes y medio. Pero ha sido, "hace menos de 24 horas" cuando las pruebas de ADN a las que se han sometido "han arrojado resultados positivos".

En este sentido, la organización ha afirmado que tanto la mujer como la familia biológica "están dispuestos a hacer público su caso en una rueda de prensa" pero hasta entonces, piden "paciencia e intimidad para vivir los momentos tan emocionantes como delicados que están pasando, y que la madre biológica conozca y asimile la noticia de que su hijo que creía muerto, es en realidad una mujer y está viva".