Alejandro Valverde vuelve a su particular territorio 'enemigo'. El ciclista murciano, quien no se ha prodigado muchos en las competiciones italianas, competirá este fin de semana en el país transalpino por primera vez desde los Mundiales de Ciclismo de Varese, en 2008.

Valverde fue castigado por dopaje entre enero de 2010 y enero de 2012 gracias a una iniciativa sancionadora del Comité Olímpico Italiano (CONI), que logró cotejar la sangre de una de las bolsas incautadas durante la 'operación Puerto' con  la de un control rutinario que tuvo lugar tras una etapa del Tour de Francia 2008 que concluyó en la estación de Pratonevoso.

Inicialmente inhabilitado para competir en suelo italiano en mayo de 2009, la sanción fue universalizada por el Tribunal de Arbitraje Deportivo (TAS) en mayo de 2010 tras un recurso del propio Valverde contra la decisión del CONI. El ciclista realmente inició la temporada 2010 y obtuvo varios éxitos, pero fue desposeído de los mismos.

Valverde tomará parte el sábado 2 de marzo en la Strade Bianche, una clásica de nuevo cuño (hasta ahora se han celebrado seis ediciones) que se inspira en el espíritu de la París-Roubaix pero cambiando sus terribles caminos adoquinados por los caminos de tierra de la Toscana (las conocidas, de ahí el nombre de la prueba, como carreteras blancas).

Al día siguiente, domingo día 3 de marzo, el corredor del Movistar disputará la Roma Máxima, la nueva denominación del antiguo Giro del Lazio, una carrera ciclista de gran tradición y que dejó de organizarse en 2008. Para este 2013 se reinventa y tendrá su línea de meta junto al Coliseo de Roma.