El titular del Juzgado de Instrucción Número 2 de Santiago de Compostela, José Antonio Vázquez Taín, dará por cerrada la instrucción de la causa sobre la sustracción del Códice Calixtino si las partes no reclaman nada nuevo o el magistrado considera que "son pruebas impertinentes".

Así lo ha indicado a Europa Press fuentes judiciales, que han explicado que el juez instructor ha notificado a las partes para que demanden la práctica de nuevas pruebas que estimen convenientes.

En el caso de que las partes no pidan nada nuevo o el magistrado estime que "son pruebas impertinentes" se dará por cerrada la instrucción y se pasará al juzgado correspondiente para que celebre juicio, según indican las mismas fuentes judiciales.

Por su parte, este viernes ha trascendido parte de la declaración del único imputado por la sustracción del Códice, el exelectricista de la Catedral de Santiago Manuel F.C., que ha sido emitida en el Programa de Ana Rosa en Telecinco, en las que el hombre reconoce, a preguntas del juez, que tenía "60.000 euros" en una papelera.

"CHAPUZAS"

En la parte del interrogatorio emitido el acusado reconocía que sus ingresos no superaban los mil euros al mes, por lo que atribuía la gran cantidad de dinero hallada en sus propiedades y en la casa de su hijo, más de millón y medio de euros, a las "chapuzas" y trabajos que hacía.

Además, al ser preguntado sobre los más de 4.000 euros que llevaba el día de su detención, el exelectricista afirmó al juez que "siempre" llevaba "ese dinero" encima. "Tengo trabajado mucho", ha esgrimido el imputado.

Sobre la fecha en la que comenzó a coger dinero en la Catedral, el acusado replicó al magistrado en el interrogatorio que "eso tiene que estar anotado en las libretas" que fueron halladas en su vivienda.

A la pregunta sobre si lo habían tratado mal en su trabajo, Manuel F.C. admitió que "en la Catedral sí", tras lo que explicó que le "gustaba vigilar" la basílica compostelana "y los anexos". Además, negó que hubiera cogido dinero de los cepillos y reconoció que si no había gente "entraba" con las llaves que le habían dado de la zona donde estaba la caja fuerte, donde sabía la ubicación de las cámaras de seguridad, según dijo.

Por otra parte, en el interrogatorio el juez le preguntó sobre si su mujer conocía la procedencia del dinero que aportaba al núcleo familiar, sobre la que dijo que ella confiaba en él. Así, explicó que él le ponía el dinero "para que cogiera lo que necesita" cuando tenía que hacer compras, pero ella "no" le preguntaba de dónde salía.