El Ayuntamiento de Santander ha declarado en ruina inminente el inmueble ubicado en los números 1 y 3 de la calle Santa Catalina, según ha anunciado el concejal de Infraestructuras, Urbanismo y Vivienda, César Díaz.

El edil explicó que el Consistorio santanderino ha ordenado a la propiedad su demolición en un plazo de seis días hábiles, así como el desalojo de los posibles moradores del edificio.

El edil precisó que se trata de un inmueble de tipología familiar rural, compuesto de varias viviendas con locales para almacén y aperos, con una superficie total de 281 metros cuadrados, distribuidos en dos plantas y construido en 1920, según el catastro.

El responsable de Infraestructuras hizo hincapié en que, tal y como consta en el informe elaborado por el arquitecto municipal, el edificio muestra "signos de un abandono muy prolongado", que se manifiesta, fundamentalmente, en el "deterioro" de la cubierta, de la que hay varias zonas que se han "desplomado".

"El resto del inmueble también se encuentra en muy mal estado, con pérdida de tabiques, carpinterías y protecciones", relató el edil, quien añadió que la situación actual de la edificación presenta un "riesgo para las personas" que puedan acceder e, incluso, acercar al mismo.

Díaz insistió en que, el edificio presenta un "deterioro de tal envergadura que hace inviable su recuperación". Por ello y, ante la situación de riesgo inminente de derrumbe, derivado del agotamiento generalizado que presenta la construcción, el Ayuntamiento declara su ruina inminente y ordena a la propiedad su demolición en el plazo de una semana.