La Audiencia Provincial de Alicante ha condenado a un hombre a una pena de 12 años de prisión y a pagar una indemnización de 600.000 euros, por participar en un atraco junto a otro individuo que no ha sido identificado y que disparó a una pareja y dejó tetrapléjico al varón al alcanzarle en el cuello.

La sección primera de la Audiencia le ha condenado por dos delitos de homicidio en grado de tentativa ya que, aunque los disparos los efectuó su cómplice, a quien no se logró identificar, la sala considera que se trata de un caso de "dolo compartido".

En estas circunstancias, el tribunal especifica que este caso "ha de entenderse como coincidencia de voluntades dirigidas a una misma finalidad", y al respecto puntualiza que "más que de responsabilidades individuales sumadas cabe hablar de una responsabilidad por la totalidad del hecho" que "alcanza" a lo que denomina "cooperadores no ejecutivos".

Además, el procesado también deberá pagar una indemnización de 480 euros al hijo de la pareja, a quien su acompañante en el atraco provocó un traumatismo craneoencefálico al golpearle con la culata del arma durante un forcejeo previo a los disparos.

Hechos probados

El tribunal considera como hechos probados que, a las 21.30 horas del 15 de noviembre de 2004, el procesado y su cómplice asaltaron a la pareja y al hijo de la mujer mientras paseaban por una calle de Elda (Alicante) con la intención de robarles.

En un momento del atraco, el acompañante no identificado del ahora condenado golpeó al hijo con la culata de la pistola dejándole semi inconsciente, mientras que el procesado abordó a la mujer con el objetivo de robarle el bolso.

Durante el forcejeo, la pareja de la mujer acudió en su ayuda, por lo que los atracadores se dirigieron a toda prisa a un vehículo que tenían aparcado en las proximidades y con el que pensaban emprender la huída, aunque finalmente abandonaron el lugar a pie.

En el momento de la evasión, el perjudicado corrió detrás de los atacantes, por lo que el coautor no identificado del asalto efectuó dos disparos, uno de los cuales alcanzó en el cuello al hombre, que quedó tetrapléjico como consecuencia del impacto, mientras que la mujer se agachó y consiguió esquivar el segundo proyectil.

Así mismo, la bala que consiguió esquivar la segunda víctima acabó incrustada en un automóvil que se encontraba estacionado en las inmediaciones, por lo que el procesado también deberá pagar una indemnización de 587 euros a su propietario.

Reconocimiento del acusado

En la fundamentación jurídica de la sentencia se explican las circunstancias de la identificación del ahora condenado, y este reconocimiento parte de que los policías que llevaron a cabo la investigación del suceso hallaron su pasaporte en la guantera del vehículo que los dos atracadores abandonaron en la escena del crimen.

Igualmente, las víctimas identificaron al ahora condenado en una rueda de reconocimiento que tuvo lugar cuatro años después del suceso, trámite que la defensa impugnó al considerar que estaba "viciado de validez" por haber visto los perjudicados la fotografía del acusado, argumento "ilógico", según la sala, por la diferencia de cuatro años entre la exhibición de la fotografía y la rueda.

Además, los investigadores hallaron varias colillas en el cenicero del vehículo con el que pretendían emprender la huída, de las que se extrajeron muestras de ADN que, al compararlas con el del acusado, se estableció que había coincidencia.