La Fundación Secretariado Gitano (FSG) ha puesto en marcha la campaña "Gitanos con estudios, gitanos con futuro" con pegadas de carteles en institutos de 13 ciudades españolas, protagonizados por jóvenes gitanos, que pretenden ser un referente de esperanza contra el fracaso escolar.

Una de esas caras es la de Samuel, un estudiante gitano de 13 años que sueña con ser abogado. Cuando este martes ha salido al patio de su instituto —el IES Magerit, de Vallecas— donde cursa segundo de ESO ha visto las paredes forradas de carteles con su cara.

Samuel, que participa en el programa de apoyo escolar Promociona, se presentó hace unas semanas a un casting de una campaña de publicidad, sin saber el objetivo, donde explicó que le apasiona aprender y defendió que los gitanos tienen que luchar por estudiar para romper la imagen que se tiene de ellos.

Sus compañeros han visto a Samuel como un estudiante con aspiraciones de futuro y su familia le ha prestado públicamente su apoyo en su deseo de seguir estudiando. "Me ha dicho que va a hacer todo lo posible por estudiar, que no le va impedir nada, ni su matrimonio, ni su noviazgo lograr su objetivo", ha explicado su padre, Samuel Escudero, quien ha animado a todas las familias gitanas a apoyar a sus hijos en sus aspiraciones de formación.

"Habría que concienciar a todos los padres para que dejen a sus hijos, tanto a ellas como a ellos, que terminen sus estudios obligatorios y cuando ya tengan una edad considerable, si quieren comprometerse o pedirse que lo hagan, pero con un trabajo, con su carné de conducir y con sus estudios", ha asegurado.

Con esta campaña y con los testimonios de sus protagonistas, la Fundación Secretariado Gitano pretende cambiar las cifras de fracaso escolar de los jóvenes gitanos; solo el 20% que comienzan la Educación Secundaria Obligatoria logra terminarla.

En primaria se ha logrado que prácticamente todos los niños gitanos estén escolarizados —el 93,2%—, pero tres de cada diez niños no asiste de forma regular a clase y más de la mitad —el 64%— tiene un rendimiento inferior al de la media de su grupo.

Los jóvenes que han recibido el apoyo escolar de Promociona —que este año ha ayudado a un millar de niños— han dado un vuelco a las cifras. Ocho de cada diez jóvenes gitanos terminaron secundaria y consiguieron su graduado en ESO y, de estos últimos, el 96% continuó sus estudios postobligatorios.

"Gitanos con estudios, gitanos con futuro" va destinada a los adolescentes gitanos, de entre 12 y 16 años, y su principal objetivo es trasmitirles que pueden llegar a ser "todo aquello que se propongan o que se atrevan a soñar".