La gastronomía pejina contará a partir de ahora con una nueva referencia, la primera en el ámbito de la repostería, con la inclusión como dulce típico de 'Los caprichos del Emperador'.

Laredo ha presentado este martes 'Los caprichos del emperador' con una degustación celebrada en el Salón de Plenos del Consistorio de Laredo, en los que los asistentes han podido probar este bocados elaborado de manera artesanal a partir de chocolate de gran pureza, praliné de almendras, cereales y semillas maridados.

Además, este dulce se ha dotado de un estuchado, con motivos nítidamente pejinos, que, según ha explicado el Ayuntamiento en un comunicado, "redondea la elegancia de un producto destinado a hacer perdurar un dulce recuerdo de Laredo en quienes lo degusten".

La presentación ha corrido a cargo del autor del dulce, el pastelero laredano Luis Fernández, y del al alcalde, Ángel Vega, y la concejal de Turismo y Festejos, Laura Recio.

Según ha resaltado el pastelero, la concepción de este bocado ha requerido "meses de pruebas" para —ha dicho— "dar con la fórmula de un dulce digno de representar a Laredo".

"Queríamos innovar y buscar algo que pudiera caracterizar a Laredo, un producto que la gente de fuera nos demandaba frecuentemente, buscando llevar algo típico de Laredo como ocurre en otros lugares", ha dicho.

El autor del dulce se ha reconocido como un "enamorado" de la fiesta del Último Desembarco de Carlos V que cada año se reedita en la villa, y su objetivo fue, según ha explicado, lograr una creación que "enlazase de forma armoniosa la fiesta con Laredo".

En torno al diseño de este dulce, ha explicado que estudiando la historia él y su hijo se dieron cuenta de que fue Carlos V quien introdujo el chocolate en las cortes europeas, lo que sirvió de punto de partida del nacimiento de 'Los caprichos del emperador'.

Según ha señalado, a partir de ahí, y tras "incontables pruebas", dieron con una receta singular.

Además, han señalado que la puesta a la venta de manera experimental en las últimas semanas "no sólo les ha confirmado el acierto de su fórmula, sino que les ha sorprendido gratamente en lo que a su receptividad entre la población se refiere".

"Ya han sido varios los que han venido pidiéndonos "Caprichos de Laredo" lo que certifica que está arraigando entre la ciudadanía", ha señalado.

"magnífico producto"

El alcalde de Laredo, Ángel Vega, ha agradecido al pastelero y su equipo el lanzamiento de una novedad que, según ha asegurado, "era largamente deseada y esperada por muchísima gente de Laredo: un producto gastronómico propio, una delicia que al nombrarse, esté evocando a Laredo, activando uno de los sentidos que procuran más disfrute, el sentido del gusto".

Además, ha felicitado a sus artífices —el pastelero y su hijo— porque, a su juicio, han logrando "un magnífico producto con una excelente presentación". "Podemos estar orgullosos de la calidad que hoy presentamos", ha afirmado.

Por su parte, la concejal de Turismo y Festejos, Laura Recio, auguró un gran éxito para este dulce y puso como ejemplo su "tirón y atractivo" durante la celebración del "Marché du Portugais" en la localidad francesa de Cenon, hermanada con Laredo desde hace un cuarto de siglo.

"Allí se vendió muy bien, y se pudo constatar el gran acierto tanto del propio dulce, como del diseño de la caja", subrayó. Además, reafirmó el empeño de la Concejalía que ella preside por "llevarlo allí donde vayamos y hacerlo marca de Laredo".

Los estuches de nueve unidades, al precio de ocho euros, podrán adquirirse en adelante no sólo en la pastelería Elysees donde se da forma a esta creación, sino en distintos comercios y establecimientos hosteleros de Laredo que ya se han puesto en contacto con los artesanos para ofrecerlos a sus clientes.

La caja en la que se presentan tiene como fondo con una maravillosa vista de Laredo, con un campo de dalias en primer plano -representativo de la Batalla de Flores- y el busto del emperador Carlos V. "Hemos querido cerrar un círculo: que todo tenga que ver y que todo identifique al pueblo de Laredo", ha explicado el pastelero.