Las negociaciones sobre el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) de la Fundación Cántabra para la Salud y el Bienestar Social (FCSBS), dependiente del Gobierno de Cantabria, se retomarán este miércoles con una nueva reunión.

Este nuevo encuentro, que se celebrará, a partir de las 9.30 horas, en La Pedrosa, sede de la Fundación, podría ser "el último" ya que el plazo de negociación expira el 30 de abril.

En declaraciones a Europa Press, el representante de la Federación de Servicios y Ciudadanía de CC.OO, Carmelo Renedo, ha lamentado que la Fundación —que ejecuta programas y acciones preventivas asistenciales, formativas, de inserción y apoyo y promoción de la salud y el bienestar social de la ciudadanía— siga manteniendo la necesidad de reducir 335.000 euros del Capítulo de Personal, con lo que debe mantener el número de trabajadores afectados por el ERE en los doce anunciados.

Renedo ha subrayado la dificultad de hacer "propuestas" para evitar estos despidos ya que, según ha dicho, al "quitarse" o "reducirse" algunos de los programas que estaba desempeñando la Fundación —un total de 15—, el personal de la FCSBS "se va a la calle".

En este sentido, ha insistido en que estos programas "se van a quedar sin hacer" ya que, a su juicio, la Consejería de Sanidad y Servicios Sociales no va a poder desarrollarlos con los funcionarios que tiene.

A juicio de Renedo, el ERE de la Fundación Cántabra para la Salud y el Bienestar Social es el "inicio del desmantelamiento de los Servicios Sociales de Cantabria".

Según ha explicado, a los 12 trabajadores que, en un principio, van a estar afectados por el ERE de la Fundación, hay que sumar otros cuatro que fueron despedidos de forma individual este año, de los cuales "2 ó 3" están resolviéndose en los Juzgados.

No se descartan más despidos

Además, Renedo no ha descartado que haya nuevos despidos en los próximos meses dentro de la Fundación y ha señalado que "en junio" se abordará el futuro de los 57 Técnicos de Educación Infantil de 2 años que trabajan en esta entidad pública y que "no se sabe que va a pasar con ellos".