La Universidad de Zaragoza empieza el traslado al nuevo edificio de Bellas Artes en Teruel

La Universidad de Zaragoza ha comenzado el traslado de material al nuevo edificio de Bellas Artes del campus universitario de Teruel. La previsión es que, en el segundo cuatrimestre de este curso la mayorías de los alumnos puedan recibir allí sus clases, ha explicado la vicerrectora del campus, Alexia Sanz.

La Universidad de Zaragoza ha comenzado el traslado de material al nuevo edificio de Bellas Artes del campus universitario de Teruel. La previsión es que, en el segundo cuatrimestre de este curso la mayorías de los alumnos puedan recibir allí sus clases, ha explicado la vicerrectora del campus, Alexia Sanz.

Las obras han costado casi seis millones de euros, pero el equipamiento del edificio va a ser recogido de las instalaciones anteriores y de otros campus, ha informado la vicerrectora este lunes.

Asimismo, Sanz ha señalado que, en las últimas semanas, se ha estado trabajando "en la adaptación de talleres, laboratorios y espacios" del edificio y en la planificación de la mudanza. Además, se ha elegido este momento porque se une "el periodo vacacional con los exámenes en los que la actividad se reduce", por lo que se reducen las molestias a los usuarios del campus.

Sanz ha confirmado que "el traslado será gradual" por lo que confía en que en el segundo cuatrimestre de este curso el edificio esté prácticamente ocupado.

Por su parte, el vicerrector de Infraestructuras de la Universidad de Zaragoza, Joaquín Royo, ha confirmado que "para equipar las aulas tendremos que buscar dentro del material que tenemos en la Universidad", ya que "no tenemos presupuesto".

El edificio, cuyas obras han costado unos 6 millones de euros, ocupa algo más de 6.000 metros cuadrados distribuidos en tres plantas. Esta facultad, diseñada por el arquitecto José Antonio Gómez, se levanta en una parcela que cedió el Ayuntamiento, entre las pistas de atletismo y el Instituto de Educación Secundaria Francés de Aranda, muy cerca del resto del campus.

En lo que se refiere al interior del edificio, Sanz ha apuntado que "se han habilitado algunos espacios compartidos para toda la comunidad universitaria, como una sala de estudio y trabajo". "Además, existen salas de usos polivalentes para actividades culturales, lúdico, deportivas porque sentíamos que había déficit en el campus", ha añadido.

Sanz ha recordado que este edificio "abre nuevas posibilidades de crecimiento para la titulación". De momento, hay 45 estudiantes por curso académico, pero "para el próximo ya hemos aprobado el incremento de las plazas, nuestro deseo es que pudiese albergar a unos 250 estudiantes".

Para ello, ha proseguido, "será necesario establecer la valoración de la demanda, de nuestras posibilidades espaciales y de la evolución de la titulación", pero confía en que "con este edificio, sí podemos plantearnos crecer".

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