Los senadores autonómicos por Baleares Francesc Antich (PSIB) y José María Rodríguez (PP) coinciden en que la reforma constitucional para introducir el límite de déficit en la administración pública tenía que hacerse con celeridad para transmitir confianza en los mercados internacionales ante las incertidumbres financieras.

Antich ha recalcado que actualmente se están viviendo momentos de "gran incerteza" financiera y "lo normal" es plantear medidas para intentar paliar la situación, ya sean de carácter "excepcional" como es el caso de la modificación de la Carta Magna.

No obstante, el ex presidente del Govern ha subrayado que "institucionalizar" el principio de estabilidad presupuestaria de las administración públicas dentro de la Constitución es "necesario" porque aporta confianza en los actuales momentos financieros.

Por su parte, Rodríguez calificó la reforma de positiva porque transmite "confianza, seriedad y rigurosidad en las cuentas públicas" por hacer que "un Gobierno, a pesar de ser Gobierno, no pueda manejar los recursos que no tiene".

Además, el senador 'popular' recordó que este acuerdo se ha alcanzado por "gran mayoría" al estar pactado por los dos grupos mayoritarios en las Cortes Generales.

Por otro lado, Rodríguez ha precisado que la reforma se hace con todas las "garantías" legales y cumpliendo "escrupulosamente" lo establecido en la Constitución para realizar cambios en la Carta Magna.