De toda gran película hay una adaptación cutre. Las redes sociales y las plataformas de vídeos han traído consigo la imaginación de grandes profesionales que, quizás no hayan tenido su gran oportunidad en la industria cinematográfica.

Es el caso de Studio 188, un estudio ruso que se está dedicando a crear tráilers de bajo coste utilizando cualquier cosa que tienen a su alcance como platos de plástico, cartón, latas de refrescos, tuberías e incluso pepinillos, entre otros.

La última película que han decidido producir ha sido Vengadores: Endgame, el éxito de Marvel que arrasó en taquilla y se convirtió en la cinta más taquillera de la historia, superando a la Avatar de James Cameron.

En su versión low cost el casco de Iron Man es una sandía hueca con luz, Rocket es un perro y Thor es un oso de peluche con gafas de sol. De esta forma tan rocambolesca han adaptado la superproducción marvelita, convirtiéndose en un éxito en Twitter, donde su vídeo (en el que comparar su adaptación con la cinta original) ya ha acumulado más de 4.500 retuits y 9.200 'me gusta'.

Pero no es la primera vez que este grupo triunfa en redes sociales. Hace tres semanas publicaron su versión de bajo coste de Kill Bill, que en su cuenta de YouTube ya tiene más de 83.000 reproducciones.

Igualmente, han adaptado otros clásicos del cine como Men in Black, Titanic o Matrix, e incluso se han atrevido con series como Juego de Tronos. Star Wars, El Señor de los Anillos y Piratas del Caribe, son otros de sus trabajos.