Un joven taiwanés de 20 años, llamado Lin Chin-Hsiang, está recibiendo el apoyo económico de numerosos desconocidos que han decidido solidarizarse con él después de que el muchacho protagonizase un desafortunado accidente.

El chico se quedó dormido mientras conducía y chocó contra tres carísismos deportivos de la marca Ferrari. Aunqué él resultó ileso, tendrá que pagar las reparaciones de su bolsillo, una cifra que asciende a 12 millones de dólares taiwaneses, el equivalente a unos 390.000 dólares estadounidenses.

Sin embargo, aunque la culpa fue claramente suya, el trasfondo de la historia ha hecho que todo el mundo se ponga de su parte. El motivo es que eran las 5.40 de la mañana y Lin estaba haciendo una entrega para la tienda de su madre después de trabajar todo un turno completo en un restaurante. Tal y como confirmó la policía, el chico simplemente estaba agotado.

"Pensé: 'Oh no, me he metido en un gran lío'. Estaba realmente preocupado por darle más problemas a mi madre y tener que pagar tanto dinero. Quería ayudarla pero acabé empeorando las cosas", dijo el chico en una entrevista.

El relato se ha hecho muy conocido en el país asiático y muchas personas se han molestado en averiguar cómo hacerle llegar dinero al joven. "Estoy muy agradecido a todos los que se ofrecieron a ayudar y que han venido a animarme. Algunas personas incluso llegaron desde el centro de Taiwán y me preguntaron dónde pueden donar dinero. Algunas pasaron mucho tiempo buscando nuestra tienda, y otras no están en una buena situación, pero aún así me dieron dinero ", reveló Lin. "Unos me dieron 5.000 dólares (taiwaneses) otros 10.000".

De momento, más de cien personas se han animado a ayudarle, lo que le ha permitido reuni 24.000 dólares. Aun así, se estima que, con el sueldo de 1.136 dólares del muchacho, tardaría 28 años en pagar la deuda.