Calores contraindicados

Si en primavera la sangre se altera, en verano estamos como locos por llenar nuestra agenda de nuevos números de teléfono con los que irnos a la cama. Pero, ¿es en realidad el verano el mejor momento para sudar la gota gorda entre las sábanas?

Si en invierno nosencanta acurrucarnos y buscar el confortable calor en los brazos de nuestroamante, en verano lo que necesitamos es un soplo de aire fresco que al menosnos permita respirar. En días en los que el mercurio no baja de los 35 grados, obien te armas de un buen aire acondicionado, o te metes en el frigorífico paratener un encuentro sexual.

El calor es perjudicial para la salud. De hecho en verano, cuando lostermómetros van a explotar, los expertos recomiendan no salir de casa en lashoras en las que el sol pega más fuerte. Sexo y calor por tanto, tampoco son buenosaliados por lo que os voy a dejar una serie de consejos para disfrutar de losencuentros sexuales en las épocas estivales sin tener que acudir al médico porcausa de una lipotimia.

  • Buscarla noche: las temperaturas suelen bajar y la sensación de frescor nos permiteuna mayor movilidad en la práctica. Además, el sexo y la descarga hormonal trastener un orgasmo nos permitirá conciliar el sueño tan ansiado en las calurosasnoches de verano.
  • Tener a mano una bebida fresca o jugar con hielos: no sólo noshidratará, también nos dará la posibilidad de realizar juegos sexuales muyfresquitos con nuestro chico o chica.
  • Lugares frescos: no es lo mismo el pajar del pueblo a las 6de la tarde que la duchita fresquita de la piscina de casa. Un lago, elmar...son lugares rodeados de agua que aportan un ingrediente muy exótico a larelación sexual y además previene de sudores que nos puedan cortar el rollo.
  • Viajes refrescantes: si al final no podemos aguantar lasaltas temperaturas del verano y lo que necesitamos es emigrar hacia lugares másfrescos, lo mejor es planificar una escapada a la montaña, el norte o paísesdonde nos aseguremos que las temperaturas no nos quitarán las ganas sexo.

Sexo mutante

Estas son sóloalgunas de las alternativas para luchar contra el calor ya que lo que noqueremos es que nos suceda lo que les pasa a algunas especies de peces. Conla llegada del calor y las altas temperaturas del agua mutan su sexo.

Lashembras de lubina pueden llegar a hacerse machos ya que el calor inhibe laformación de aromatasa, una enzima que convierte los andrógenos en estrógenos,que son esenciales en el desarrollo de los ovarios de los peces. Si ya somosdemasiados peces en el mar para ligar... ¡Imagina si se convierten todos enhombres!

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