Idolatrar a un personaje puede salir muy caro. El ejemplo perfecto es el de Bruna Barbie, una mujer de Curitiba (Brasil), cuyo fanatismo por la muñeca le ha llevado a gastarse miles y miles de euros para parecerse a ella y tener todo como en sus míticas películas.

Bruna es la fan número uno de la Barbie, todo en su mundo es de color rosa: el coche, la casa, la ropa... Todo eso ha hecho que se convierta en una gran sensación en Instagram para los seguidores de la muñeca. 

Su admiración es tal que recibió el apodo de Barbie ya en la escuela. Desde entonces, es conocida por ello. Aunque es licenciada en derecho, sus ingresos llegan por su amor al rosa y sus similitudes en la vida real con la ficción.

A pesar de que hace todo lo que la muñeca, ella dice que tan solo es su inspiración. "No trato de ser Barbie", aclara. Su pasión por el rosa hace que también ame "a Elle Woods, de Legally blonde, así como a Paris Hilton".

La última locura que ha hecho por su admiración ha sido gastar 180.000 euros para convertir su casa en la mansión de Barbie. Es completamente rosa, también el agua de la piscina. El dormitorio, los electrodomésticos, la cocina y sus utensilios, el baño... Todo es del mismo color en la vivienda de Bruna.

 "Con mi exitoso trabajo como influencer, comencé a ganar mucho dinero. Entonces vi la posibilidad de construir una casa inspirada en Barbie e inspirada en mi estilo rosa. Mi hogar es un lugar donde los deseos se hacen realidad, donde la imaginación se transforma en experiencias dulces, rosadas e inigualables y donde la fantasía va de la mano con el mundo real", dice Bruna para justificar sus elecciones.