Si estás junto a un criminal en el momento en el que este comete un delito podrías ser considerado su cómplice, aunque hay excepciones, como por ejemplo, ser de una especie distinta a la humana. 

Es lo que sucedió cuando la policía del condado de Lake, en Michigan (EE UU) realizó una breve persecución siguiendo a un coche que se había dado a la fuga en un control. Al acercarse al vehículo descubrieron un cocodrilo haciendo de copiloto. 

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La persecución terminó cuando el vehículo que huía quedó atascado entre dos árboles en el camino. El conductor, un hombre de 40 años, fue arrestado por múltiples cargos y los agentes descubrieron que tenía  "varias órdenes judiciales de otra jurisdicción".

Pero también repararon los agentes en que su acompañante era un cocodrilo, al que la policía nombró como Karen. 

"Karen intentó huir de la escena, pero fue detenida después de una breve pelea", dijo con humor la policía en su cuenta de Facebook. 

"Karen no se enfrenta a ningún cargo en este momento. Creemos que no participó en el incidente, y tampoco creemos que haya conducido el vehículo", añadían con guasa los policías. 

Oficina del Sheriff del Condado de Lake