Alrededor de todo el mundo hay numerosos parques de atracciones que sorprenden a grandes y pequeños, pero ninguno es como el que hay en San Luis, Estados Unidos. Se trata de Cementland, uno de los parques más extraños, en total desuso, y con una historia detrás de lo más misteriosa.

En sus inicios fue una fábrica de cemento, de ahí el nombre que recibe. Más tarde lo adquirió Bob Cassilly, conocido escultor de la ciudad, con la intención de dejar atrás lo que se había convertido ya en un vertedero para que las empresas constructoras.

PAUL SABLEMAN / FLICKR

Su objetivo era crear un lugar maravilloso que conjugase la arquitectura, la historia y los paisajes más característicos de Estados Unidos, oponiéndose al deterioro que ya estaba sufriendo la zona. 

Sin embargo, su sueño nunca llegó a hacerse realidad. Cassilly murió de una manera un tanto extraña cuando se encontraba realizando las obras en el complejo. Fue atropellado por una excavadora, lo que provocó su muerte el 26 de septiembre de 2011, cuando solo tenía 61 años.

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Puede parecer un simple accidente, pero posteriormente su esposa y varios expertos médicos lucharon durante años por desmentir esa teoría. Incluso en 2016, uno de esos doctores quiso demostrar que Cassilly fue asesinado a golpes, no por accidente, tras estudiar nuevamente los informes de su autopsia.

Años después, se produjo un incendio, lo que provocó el derrumbe del techo y su deterioro más amplio. Desde entonces, el parque se encuentra incompleto y abandonado, sin atisbos de mejora.