Los debates en Twitter pueden ser de lo más encarnizados. Desde discusiones por los gustos culinarios a la forma en la que se llama a una determinada cosa en cada región, muchos son los motivos de las discusiones. Pero si hay otro asunto que enfrenta a dos bandos claros, ese es las consolas.
Sony o Microsoft, PlayStation o Xbox y, ahora, PS5 o Xbox Series X son los temas que acostumbran a debatir los gamers, dejando a los fans de Nintendo más al margen y disfrutando tranquilamente de su catálogo de Switch.
Sin embargo, para defender una u otra consola, muchos terminan intentando abanderarse de ser todo un erudito, ya sea en el mundo de la tecnología o en otro ámbito. Y así le sucedió a Shreeveera, un tuitero que terminó borrándose la cuenta por las consecuencias que le trajo la prueba que publicó para demostrar su 'inteligencia'.
"Aquí estoy después de inducir la anestesia, intubar y poner a un paciente en ventilación mecánica controlada", escribió el usuario al ver que, en la discusión, sus críticos no creían que fuera médico. Y, junto a la publicación, mostró un vídeo en el que grababa el quirófano, con el paciente dormido y otros médicos operándole, y después enseñaba los documentos del enfermo que, según él, le había dado permiso para enseñar.
@Shreeveera is a doctor and a PlayStation fanboy out here claiming he has consent to show private information, so he shouldn’t mind this.
— Tarnished Fenix (@FenixMune) March 7, 2022
I’ll never delete this.
The level of mental degradation you gotta have to do this.
Being a console warrior makes you an idiot. pic.twitter.com/dMfvUmuxxe
"¡Tras calumniar mi identidad, enseño mi profesión porque ustedes, los bots de Xbox, no saben rebatir los hechos!", añadió. "Salvar vidas es mi trabajo. Las guerras de consolas, mi hobby".
Tal y como compartió Dexerto, esta publicación generó rápidamente un aluvión de críticas por publicar algo tan privado como una operación y los documentos del paciente, aunque le diera permiso. Y todo ello para defender las consolas de PlayStation.
Tras los comentarios negativos, Shreeveera borró el vídeo, se disculpó públicamente y eliminó su cuenta, pero los usuarios encontraron el hospital en el que trabaja y llenaron su perfil de Google de reseñas criticando la actitud del anestesista.
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